PARÍS.- El nuevo primer ministro francés, Manuel Valls, le anunció este martes a sus compatriotas fuertes recortes en el gasto público, así como reducciones en la carga social para las empresas.
Como lo diera a conocer el presidente Francois Hollande, el gasto público se achicará hasta 2017 en 50.000 millones de euros (69.000 millones de dólares), explicó este martes Valls en su primera declaración de gobierno.
Además, la Asamblea Nacional le dio posteriormente un voto de confianza al primer ministro de 51 años. Un total de 306 parlamentarios respaldaron al nuevo gobierno, mientras que 239 sufragaron contra Valls y 26 se abstuvieron.
Del total, unos 19.000 millones de euros saldrán del presupuesto, mientras que 10.000 millones se recortarán de la seguridad social y otro tanto de las comunas, precisó Valls.
Las contribuciones a la seguridad social serán eliminadas en el caso de los salarios mínimos y reducidas en la mayoría de los otros asalariados, anunció. A la vez, quienes ganen un salario mínimo tendrán cada año 500 euros más en sus bolsillos.
Además, el flamante primer ministro propuso que el impuesto que grava los beneficios de las empresas se reduzca de 33,33 a 28 por ciento hasta 2020.
Asimismo, serán racionalizados los gobiernos locales de diferentes niveles y el número de regiones -actualmente 26- se reducirá a la mitad.
Valls mostró hoy un tono combativo al dirigirse a los legisladores.
"Debemos restaurar las finanzas, públicas pero sin romper nuestro modelo social", aseveró, comunicándole a sus socios europeos que París necesita más tiempo para cumplir con sus compromisos de reducción del déficit.
Valls manifestó que el respaldo a las empresas sirve para fomentar el empleo, las inversiones y exportaciones. El jefe de gobierno también consideró que actualmente en Francia hay "demasiado sufrimiento" y "demasiado poca esperanza", y que la gente ahora desea "resultados concretos".