PARÍS.- El nuevo Primer Ministro francés, Manuel Valls, prometió hoy que no subirá los impuestos porque los franceses ya han contribuido "suficiente" en los cuatro últimos años.
Según el nuevo jefe del Gobierno, los franceses pagan 60.000 millones de euros de impuestos más que en 2010, con sendas subidas de 30.000 millones tanto bajo presidencia del conservador Nicolas Sarkozy como con el socialista François Hollande en el Palacio del Elíseo.
"Es suficiente", agregó el jefe de gabinete, que ayer explicó en la Asamblea Nacional que bajará las cargas impositivas a las empresas y a las rentas más bajas.
En su primera entrevista tras su investidura ayer, el nuevo jefe del Ejecutivo francés insistió en que reducirá las cargas impositivas a las empresas para facilitar la contratación, aunque no exigirá una contrapartida a la patronal.
"No se trata de decir cuántos empleos se van a crear, eso sería contrario a la realidad económica", declaró Valls en la cadena "BFMTV", donde adelantó que en unas horas nombrará "una docena" paritaria de secretarios de Estado para cerrar un Gobierno que sirva para "hacer ganar a Francia".
El objetivo de su Ejecutivo, dijo, es "crear las condiciones que permitan a nuestras empresas y a la economía francesa ser competitivas" y pidió "un poco de tiempo para desplegar lo que se ha anunciado".
Valls, nacido en Barcelona hace 52 años, también reforzó su mensaje crítico hacia Bruselas y, de cara a las próximas elecciones al Parlamento Europeo (PE) del 25 de mayo señaló que hay que preguntarse "cómo podemos pilotar mejor nuestra política económica y monetaria" de la UE.