Conozca los principales obstáculos para los emprendedores en Chile

SANTIAGO.- En los últimos años, Chile ha experimentado un explosivo crecimiento de emprendimientos gracias a sus características favorables, como la estabilidad económica. Sin embargo, las estadísticas muestran que el 90% de los emprendimientos perecen en los primeros 5 años de vida.

“Con un 100% de certeza me atrevo a decir que el 99% de las ideas que se puedan ocurrir están siendo pensadas o ya fueron pensadas por otra persona. El valor está en el proyecto y en la ejecución real de esa idea”, comenta Roberto León, gerente general de Dentalink, software que apoya la administración de consultas y clínicas odontológicas.

Andrés Luengo, dueño de allGreenup, una aplicación móvil que busca y promueve generar hábitos sustentables para el medio ambiente, cree que “uno puede tener la mejor idea del mundo, tener pensado el proceso del servicio, planear el desarrollo tecnológico e incluso cómo lo llevarás a producción, pero esto se convierte en humo si no se acompaña de un modelo que sea sustentable económicamente. Suena muy sencillo, pero es algo que suele no cuestionarse mucho cuando uno cree y sueña que tiene la idea perfecta”.

Así, pensando en los cientos de jóvenes que tienen ganas de iniciar un proyecto o están en el proceso de llevarlo a cabo, Emol tomó la experiencia de tres emprendedores exitosos y la aceleradora de Negocios Magical Startups, y elaboró una lista con los principales obstáculos a tener en cuenta a la hora de emprender. Conócelos a continuación:

Mercado pequeño. Chile tiene sólo 17 millones de habitantes. Si bien un negocio con un millón de clientes es en extremo exitoso, es también extremadamente difícil llegar a ese número. Esto afecta principalmente a los negocios “B2C” (Business to consumer), es decir, aquellos que orientan su producto a personas naturales, como Facebook o Twitter, por ejemplo.

“Por más innovador y genial que sea un proyecto, es muy diferente hacerlo en EE.UU. a estar intentando hacerlo en Chile, que tiene una población pequeña y que recién ingresa en temas tecnológicos”, asegura Roberto León.

Dificultad para armar un buen equipo. En las actuales condiciones de pleno empleo es cada vez más difícil encontrar buenos profesionales, en especial en el área TI que tienen mucha demanda, asegura Ignacio Canals, fundador de LemonTech, empresa especialista en desarrollo de proyectos informáticos basados en la web.

Falta de habilidades en administración. El fenómeno creciente de emprendedores jóvenes trae consecuencias positivas al país en el mediano y largo plazo, como altas capacidades de creación de valor y autonomía de trabajo de las próximas generaciones. No obstante, en el corto plazo se ha visto una alta inexperiencia y poco profesionalismo para ejecutar proyectos, lo que se refleja en mala selección de proveedores o estrategias de crecimiento de la empresa.

“La selección de malos proveedores implica que los productos finales de los emprendimientos no son de calidad mundial, bajando la cantidad de gente que desea el producto y está dispuesto a pagar por él”, explica Tadashi Takaoka, gerente general de Magical Startups.

Falta de apoyo al emprendedor. “Hay un miedo al cambio y la innovación. ‘Para qué cambiar si lo que hago hoy lo hago bien y gano plata’. Esta frase la he escuchado mil veces cuando vas a tocar una puerta, te dicen tu idea es fantástica y la compraría, pero hablemos más adelante. Siento que aún cuando somos un país con excelentes competencias, a ratos tratamos de quedarnos en la zona cómoda, sobre todo las instituciones públicas, que deberían ser las primeras en apoyar a emprendedores nacionales con el fin de agregar valor a nuestra oferta como país”, asevera Andrés Luengo.

Falta de mentores digitales con experiencia. No son muchas las historias en Chile de emprendedores que hayan logrado que su startup crezca a gran escala. Un buen mentor digital es aquel que maneja estadísticas y experiencia suficiente para aportar con información no formal de cómo recorrer el emprendimiento.

“No existen mentores suficientes del mundo digital que puedan trabajar contigo en el camino a recorrer para llegar al éxito. Si bien no existe la receta, un buen consejo puede hacer la diferencia entre el camino correcto y el precipicio”, concluye Takaoka.