BRUSELAS.- La Unión Europea (UE) pretende acordar en su reunión de junio la propuesta de la Comisión Europea (CE) para impedir que multinacionales como Apple, Amazon, Google o Starbucks sigan aprovechando las lagunas para eludir el pago de impuestos.
Los Veintiocho quieren cerrar los resquicios legales en la ley que regula la distribución de beneficios entre las empresas matrices y sus subsidiarias y para ello la CE enmendó la directiva matriz-subsidiaria, que fue inicialmente concebida para prevenir la doble imposición de las empresas del mismo grupo situadas en diferentes Estados miembros.
Disparidades en los sistemas tributarios de los Veintiocho han permitido a algunas compañías aprovecharse de lagunas en esta ley para minimizar sus impuestos o incluso esquivar el pago de impuestos del todo.
El ministro griego de Finanzas, Yannis Stournaras, afirmó en el debate público que adoptar la directiva enmendada en junio representaría "un paso tangible hacia adelante en la lucha contra el fraude y la evasión fiscal y la planificación fiscal agresiva".
Dijo que hay un "apoyo general" sobre la primera parte de la propuesta: los préstamos híbridos, pero la segunda, que obligará a unas reglas anti-abuso comunes, requieren más trabajo.
La presidencia griega de turno de la UE ha presentado un compromiso que permitiría un acuerdo político sobre el primer elemento y una declaración en la que se aclara que el Consejo seguirá trabajando en el otro factor.
El ministro español de Economía, Luis de Guindos, afirmó que la directiva es "un primer paso en la dirección adecuada para luchar contra los abusos" y que la legislación debe ser vista como "un punto de partida" para más debates.
Los préstamos híbridos son una herramienta de planificación fiscal que pueden aprovechar especialmente las lagunas en la directiva para minimizar o eludir impuestos.
La directiva obliga actualmente a los Estados miembros a eximir a la firma matriz del pago de impuestos sobre dividendos que recibe de subsidiarias ubicadas en otro Estado miembro.
No obstante, se trata de instrumentos financieros que tienen las características tanto de deuda como de capital, y debido a ello los Estados miembros les dan diferentes tratos tributarios: algunos los califican como un préstamo simple y otros los ven como capital.
Como resultado los préstamos híbridos pueden ser considerados como un gasto deducible en calidad de pago de intereses en el país donde se encuentra la subsidiaria y quedar eximido del tributo al ser considerado un dividendo en el Estado miembro sede de la matriz.
De esta manera, si una compañía elige inteligentemente donde ubicar su sede y su subsidiaria, no paga en ningún caso impuestos sobre estos instrumentos financieros.
Ahora, la CE pretende cerrar esta laguna en la directiva al proponer que el préstamo híbrido tribute necesariamente en el Estado miembro de la matriz si es deducible en el país de la subsidiaria.
La segunda medida que toma el Ejecutivo comunitario para luchar contra las prácticas fiscales de multinacionales en la UE es actualizar la provisión anti-abuso en la directiva para obligar a los Estados miembros a adoptar una regla común que les permita ignorar la planificación fiscal artificial entre matriz y subsidiaria que tiene como fin eludir impuestos.
Esos acuerdos artificiales son por ejemplo la creación de sociedades pantalla sin ninguna sustancia, es decir que no tienen empleados ni presencia física pero canalizar miles de millones de euros de sus ganancias globales para evitar el pago de impuestos en otro Estado miembro de la UE o un país tercero.
La propuesta de la CE asegura que los Estados miembros puedan gravar en base a lo que consideran una "sustancia económica real" de las empresas.