CANNES.- Renault, la tercera mayor automotriz de Europa, frenará el lanzamiento de vehículos eléctricos, dando otra señal de que la demanda de los consumidores de autos de emisión cero no llega a las previsiones de las automotrices.
La versión a batería del auto urbano Twingo rediseñado, presentada en el Salón del Automóvil de Ginebra este año, está en suspenso, dijo ayer el máximo responsable de rendimiento Jerôme Stoll en una entrevista en Cannes, Francia, sin dar una fecha precisa para el comienzo de la venta del modelo.
"No estamos en una situación en la que el mercado haya seguido nuestros pronósticos”, señaló Stoll. "La gente todavía no llegó al punto en que siente la necesidad de tener un vehículo eléctrico para uso diario. La gente tiene que sentir esa necesidad para cambiar por los modelos eléctricos".
Los vehículos a batería para el mercado masivo no cumplieron con las metas de entrega de la industria porque los compradores objetan su falta de autonomía y que tengan un precio más caro en comparación con los autos a gasolina o diesel.
La excepción ha sido el segmento de lujo, en el que el líder del mercado Bayerische Motoren Werke AG aumentó la producción del auto urbano eléctrico i3 este año en tanto las órdenes de compra superaron los pronósticos, y Tesla Motors Inc. dijo este mes que el crecimiento de las ventas de su sedán Modelo S se vieron restringidas por limitaciones en la provisión de baterías.
Compradores Premium
"La mayoría de las personas que compran vehículos eléctricos suelen ser compradores premium, ya que los autos de emisión cero son más caros”, explicó telefónicamente Sascha Gommel, analista de Commerzbank AG en Frankfurt que recomienda mantener las acciones de Renault.
"Prefieren ir a marcas de lujo como Tesla o BMW y no a un fabricante de autos convencionales del mercado masivo como Renault, que debe justificar la diferencia de precio de sus autos eléctricos", agregó.
En Alemania, el mayor mercado automotor de Europa, había en uso unos 12.200 autos totalmente eléctricos a comienzos de 2014, de un total de 43,9 millones de autos registrados, según la Oficina Federal de Vehículos a Motor. Eso representa el 0,1% del millón de autos a batería que la Canciller alemana, Angela Merkel, quiere que circulen por las rutas del país a fin de esta década.
Volkswagen AG, automotriz con sede en Wolfsburgo, Alemania, que es la más grande de Europa, en septiembre anunció planes de ofrecer hasta cuarenta vehículos eléctricos o híbridos, incluidos catorce modelos con propulsión alternativa para fin de 2014.
BMW de Munich, que comenzará a entregar el auto deportivo híbrido i8 en junio, lanzó el i3 de 34.950 euros (unos US$ 48 mil) en noviembre y dijo en abril que aumentará la producción un 43%.
Los titulares de ambas compañías expresaron en octubre que están de acuerdo con la meta de autos eléctricos que fijó Merkel para 2020.