Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo
EFEFRANKFURT.- El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, dijo que las compras de activos a gran escala son parte de las herramientas de política monetaria del banco, pero que por ahora la entidad se centraría en sus últimas medidas de estímulo.
Draghi dijo al periódico holandés De Telegraaf que la recuperación de la zona euro seguía siendo débil, desigual y vulnerable y que las tasas de interés se mantendrían bajas por un largo periodo de tiempo.
Cuando se le preguntó qué debe suceder antes de que el BCE comience a comprar activos para darle a los bancos más dinero para prestar, algo conocido como alivio cuantitativo, Draghi afirmó que "esa sería la respuesta a un deterioro de las expectativas de inflación en el mediano plazo".
"Por el momento, no obstante, nos estamos centrando en las medidas anunciadas el 5 de junio", dijo Draghi.
La meta de inflación del BCE en el mediano plazo es menor pero cercana al 2%, bastante lejos de los niveles actuales de 0,5%, algo que ha generado preocupación de que la zona euro pueda ingresar en una espiral deflacionaria de caída de precios similar a la que impactó a Japón, que desacelera el crecimiento y apaga el consumo y la inversión.
En el encuentro de política monetaria de junio, el BCE recortó el tipo de interés a mínimos récord -con la tasa de depósitos bancarios por debajo de cero- y lanzó una serie de medidas para fortalecer el crédito a las compañías. Tras la reunión, Draghi dijo que el BCE podría hacer más si era necesario.
Comprar bonos de gobiernos "es ciertamente posible dentro de nuestro mandato, principalmente si las compras son destinadas a asegurar la estabilidad de precios", dijo Draghi al diario.
"Alivio cuantitativo puede incluir no sólo bonos del gobierno, pero también préstamos del sector privado. Discutiremos eso cuando llegue el momento", afirmó.
Sin embargo, enfatizó que el BCE no había visto deflación en el sentido de caída de precios a lo largo de la zona euro, con familias y empresas aplazando su consumo e inversiones mientras esperan que bajen más los precios.
No obstante, la recuperación sigue siendo vulnerable y Draghi advirtió que problemas en la economía global podrían "cambiar rápidamente la situación". Una inflación persistentemente baja también hace más difícil los ajustes económicos, agregó.
Cuando se le preguntó cuánto tiempo permanecerán bajas las tasas de interés, el presidente del BCE dijo: "Hemos prolongado el acceso de los bancos a liquidez ilimitada hasta fines del 2016. Esa es una señal. Nuestro programa de respaldo del préstamo bancario a las empresas continuará por cuatro años. Eso demuestra que las tasas de interés permanecerán bajas por un periodo de tiempo más largo".