MADRID.- El crecimiento en España se aceleró durante el segundo trimestre un 0,6%, lo que representa una buena noticia, aunque los precios de julio muestran que los niveles de consumo se mantienen a un nivel bajo.
Se trata del mejor dato sobre el crecimiento desde fines de 2007 y del cuarto trimestre consecutivo al alza, informó el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
Entre abril y junio, la economía española, que en el primer trimestre había crecido 0,4%, superó incluso las expectativas del Banco de España, que había previsto una progresión de 0,5%.
En términos de variación anual, el aumento fue del 1,2% y se explica por "una mejora de la aportación de la demanda nacional, que es contrarrestada parcialmente por un empeoramiento de la aportación de la demanda externa", indicó en un comunicado el INE.
Si bien la tasa de desempleo sigue muy elevada (24,4% en el segundo trimestre) y los salarios bajos, los españoles se sienten más optimistas y destinan más dinero al consumo, estimó Thibault Mercier, analista de BNP Paribas.
Además "las inversiones de las empresas son muy dinámicas", agregó.
Pero la demanda se mantiene demasiado baja para empujar los precios al alza. Así, el índice de precios al consumo cayó un 0,3% interanual en julio, según datos provisionales del INE.
"Esta reducción se explica, principalmente, por la estabilidad de los precios de los carburantes y lubricantes y los alimentos y bebidas no alcohólicas, frente a las subidas experimentadas en 2013", explicó el Instituto. "También influye en esta evolución la bajada de los precios de la energía eléctrica", añadió.
La inflación, calculada en datos armonizados con los de la Unión Europea, ya pasó a valores negativos en marzo, cuando los precios cayeron un 0,2%. Pero volvieron a subir ligeramente en abril (+0,3%) y en mayo (+0,2%) y se estabilizaron en junio.
El Banco Central Europeo (BCE) preconiza una inflación ligeramente inferior al 2%, muy por encima del dato de julio.
Para la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autonómos y Emprendedores (UATAE) todo indica que el bajo nivel de los precios, "al borde de la deflación", se mantendrá en los próximos meses, señal de que la recuperación económica es "desesperadamente lenta", afirmó su secretaria general, María José Landaburu.
No obstante, España todavía está lejos de verse amenazada por la deflación, que corresponde a una bajada generalizada en un periodo continuado de los precios y los salarios, socavando el conjunto de la economía, según Mercier.
España, que salió de la recesión en el tercer trimestre de 2013, vivió un periodo de deflación en 2009 con un retroceso de los precios durante ocho meses consecutivos.
La débil tasa de inflación, que concierne el conjunto de la zona euro, inquieta al BCE. El banco adoptó en junio una serie de medidas excepcionales para dar un impulso a la economía europea y hacer subir la inflación.
El gobierno español se mantiene empero optimista sobre las perspectivas del país.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, revisó el martes al alza las previsiones. El ejecutivo prevé un crecimiento del PIB cercano al 1,5% en 2014 y 2% en 2015, frente al 1,2% y 1,8% proyectado anteriormente.