BRUSELAS.- La residencia de verano de los reyes de Holanda en Grecia ha vuelto a atraer la atención de los holandeses, después de que se conociera hoy que el Estado ha pagado casi medio millón de euros por el uso de un terreno para levantar una valla de seguridad, más de diez veces el supuesto valor real.
El Estado holandés pagó a un vecino 461.000 euros (US$ 613.000) el año pasado por dos franjas de tierra que tenían en realidad un valor de mercado mas de 10 veces menor, de 35.414 euros (US$ 47.344), según documentos confidenciales a los que tuvo acceso la cadena de televisión RTL.
El rey Guillermo-Alejandro compró la villa, en la localidad griega de Kranidi, en 2012 por 4,5 millones de euros (unos US$ 6 millones).
Un abogado griego abrió entonces negociaciones en nombre del ministro de Justicia Ivo Opstelten para utilizar terreno de un vecino a fin de construir una valla de seguridad.
El acuerdo se cerró finalmente el año pasado y establece el derecho de uso durante 30 años por parte del Gobierno holandés de dos trozos de tierra de 1.034 y 376 metros cuadrados para la construcción de una "valla de seguridad", indica RTL.
El abogado viajó con la autorización de Opstelten como "enviado especial y agente del Estado" a La Haya para reunirse con un notario para negociar el derecho de uso de las dos franjas de terreno.
El Estado pagó, según la cadena de televisión, casi medio millón de euros por ello un año después de que el rey comprara la vivienda, cuando el valor de mercado de la tierra era solo 35.414 euros (US$ 47 mil dólares), de acuerdo con documentos obtenidos por RTL.
Se desconoce en cuántos más gastos ha incurrido el Estado holandés por la residencia de verano de los reyes, indica la cadena, que afirma que el primer ministro, Mark Rutte, ha revelado el coste de 461.000 euros en respuesta a preguntas del Parlamento, que exigió aclaraciones sobre el rol preciso del Gobierno en esta residencia y las implicaciones para el Tesoro.
El servicio de información del Estado holandés no quiso pronunciarse sobre los detalles del acuerdo y solo indicó que el terreno "es necesario para medidas de seguridad que el Gobierno está tomando".
Los reyes de Holanda compraron la residencia griega de verano después de que vendieran, aún siendo príncipes, otra villa de vacaciones en Mozambique, de la que tuvieron que desprenderse por las críticas políticas y ciudadanas desatadas.
En 2009, ante las críticas contra la pareja por construir una lujosa villa en un período de crisis económica y ajustes presupuestarios públicos, Guillermo-Alejandro y Máxima comunicaron que la pondrían en venta.