SANTIAGO.- El vicepresidente ejecutivo de la chilena Embotelladora Andina, Miguel Ángel Peirano, señaló que el alza de impuestos a las bebidas azucaradas, que se incluye en la propuesta de Reforma Tributaria que se discute en el Congreso, implicará un incremento en los precios de los productos que comercializa la compañía.
"Claramente, el incremento de impuestos en el momento que llegue va a implicar un incremento de precios para compensar el mayor costo que nos va a generar", confidenció el ejecutivo en un conference call con inversionistas realizado tras la entrega de resultados del segundo trimestre del año.
Peirano agregó que "la acotación de márgenes es una preocupación constante para nosotros. Sin duda, vamos a estar buscando la mejor manera de poder mejorar los mismos a través de precios y de reducción de costos, en la medida que el mercado lo permita (…) pero siempre vamos a tener en cuenta el impacto y la elasticidad que estos incrementos nos generen que el resultado siempre sea positivo".
En cuanto a los efectos que está teniendo el tipo de cambio en los resultados de la compañía, el gerente corporativo de Finanzas, Andrés Wainer, recordó que gran parte de los costos de la compañía se encuentran dolarizados, por lo que ante una mayor depreciación del peso chileno, las cifras de la empresa seguirán viéndose afectadas.
"Ahora la gran variable que acá puede incidir a favor o en contra en lo que queda del año son los tipos de cambio en los cuatro países donde operamos. Hay que recordar que una parte importante de los costos son dolarizados, por lo tanto una depreciación importante en alguna de las monedas, obviamente nos va a afectar, o por otro lado una apreciación de una de las monedas también nos puede ayudar", acotó el ejecutivo.
En el segundo trimestre del año, las utilidades de la embotelladora se contrajeron un 70,25% hasta los $ 4.197,79 millones, lo que según la compañía se vio influenciado, entre otros, por los costos financieros de la deuda emitida durante el 2013 para financiar la adquisición de Ipiranga, y por pérdidas por unidades de reajuste asociadas a la deuda denominada en UF que mantiene la compañía.