BUDAPEST.- Hungría ha cerrado de forma "indefinida" un gasoducto que conecta con Ucrania tras aducir el "considerable" aumento en estas fechas de la demanda interna, mientras que la compañía estatal ucraniana de gas Naftogaz se mostró hoy "sorprendida" por la medida.
La distribuidora privada de gas FGSZ informó en un comunicado sobre la suspensión "por una duración indefinida" de la entrega del combustible debido a que desde hoy aumenta considerablemente la demanda interna en Hungría.
Ucrania ha recibido en los últimos meses gas de Hungría, Polonia y Eslovaquia, ya que Rusia cortó el suministro a Ucrania en junio tras una disputa por el pago de la deuda pendiente.
FGSZ entrega 6.100 millones de metros cúbicos anuales de gas a Ucrania, lo que supone una cantidad de 16,8 millones de metros cúbicos diarios.
Naftogaz lamentó la medida y pidió a la empresa húngara que "respete sus obligaciones y las leyes comunitarias", ya que considera que la suspensión vulnera el principio de unidad de mercado de la Unión Europea (UE), según recoge el portal económico húngaro Napi.
"Ni a los países de la UE, ni a Ucrania se les puede presionar con un chantaje utilizando la energía", aseguró Naftogaz.
El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, dijo hoy en la radio pública MR1 que el país "no puede encontrarse en una situación en la que la gente no reciba energía", y que actualmente aumentan las reservas húngaras para que alcancen el 60 por ciento del almacenamiento disponible.
La decisión de Hungría llega después de que Orbán se reuniera el lunes en Budapest con el presidente de la gasista rusa Gazprom, Alexéi Miller.
Aunque no ha trascendido el contenido de la reunión, Orbán declaró hoy en la radio que habían acordado que Hungría recibirá "nuevas cantidades" de gas para incrementar sus reservas.
Orbán, que mantiene una buena relación con el Presidente ruso, Vladimir Putin, ha criticado en varias ocasiones la imposición de sanciones de la UE a Rusia por su papel en la crisis de Ucrania.