EFE
TOKIO.- La actividad manufacturera en Japón creció en octubre a su mayor ritmo en siete meses debido a que las órdenes nacionales e internacionales aumentaron, mostró hoy un sondeo, en una alentadora señal de que la economía podría estar recuperándose finalmente de un aumento de impuesto a las ventas en abril.
El índice anticipado de gerentes de compra (PMI) del sector manufacturero de Japón elaborado por Markit/JMMA subió a 52,8 puntos ajustados por estacionalidad en octubre, desde una cifra definitiva de 51,7 en septiembre.
El índice se mantuvo sobre el umbral de 50 puntos que separa a la expansión de la contracción por quinto mes y alcanzó su nivel más alto desde marzo.
El sondeo mostró que las empresas del sector manufacturero han superado un aumento temporal de inventarios después del alza de impuestos y sugiere que la podría crecer hacia final de año, lo que facilitaría la decisión del gobierno sobre si procederá con un segundo aumento de impuestos previsto para octubre del 2015.
El índice de nuevas órdenes domésticas subió preliminarmente a 55,1 puntos en octubre, su mayor nivel en ocho meses.
El índice anticipado de nuevas órdenes de exportaciones también subió a 52,6 puntos desde la cifra final de 51,1 de septiembre.
El componente de la producción del índice del PMI cayó levemente a una cifra preliminar de 52,3 puntos, desde 53,4 puntos en el mes anterior.
Las manufacturas y el gasto de los consumidores se debilitaron después de que el Gobierno aumentó el impuesto a las ventas desde un 5% a un 8% en abril, llevando a la economía de Japón a su más profunda caída trimestral desde la crisis financiera global del 2009.
El segundo aumento llevará el impuesto a las ventas a un 10% y es parte de un plan para pagar por el gasto en el sistema de bienestar.
El primer ministro Shinzo Abe dijo que decidirá a fin de año si continuará con la segunda alza de impuestos. Uno de los principales asesores económicos de Abe, Etsuro Honda, pidió el miércoles que la medida se postergue hasta abril del 2017.
Las señales de una recuperación de las manufacturas y de una remontada de la demanda por exportaciones podrían aliviar algunas de las preocupaciones de los políticos sobre que la economía no podría soportar otro golpe de un aumento tributario.