BUENOS AIRES.- Las monedas latinoamericanas seguirán débiles esta semana después de que unos números inesperadamente sólidos del empleo en Estados Unidos reforzaron las perspectivas de una subida de tasas de la Reserva Federal en 2015, golpeando a los activos de mercados emergentes.
Los empleadores estadounidenses incorporaron en noviembre la mayor cantidad de trabajadores en casi tres años al tiempo que crecieron los salarios, una señal de fortaleza económica que podría acercar a la Fed a subir las tasas de interés. Esto provocó caídas en las monedas regionales al cierre de la semana.
Un dato importante en el corto plazo será el reporte de la evolución de los precios al productor de Estados Unidos el mes pasado, que se divulgará el viernes. Los operadores esperan una lectura tenue, pero si resulta más fuerte de lo esperado, las monedas latinoamericanas profundizarían las pérdidas.
El peso chileno haría pie dentro de un rango de cotizaciones flojas, de $605 a $613 por dólar, dijo un operador en Santiago. "En los últimos días se ha visto una moderación en la escalada del tipo de cambio y algo de toma de ganancias en ciertos niveles de precios", sostuvo.
Por su parte el real brasileño podría anotar una apreciación muy leve a 2,55 por dólar desde 2,60, dijo Reginaldo Siaca, de la correduría TOV. "Si se tiene en cuenta la perspectiva de una mejora de la política económica, el dólar debería estar un poco más bajo" contra el real, dijo.
En tanto, el peso argentino mayorista, que acumula una depreciación de casi un 24% en el transcurso del 2014, mantendría su tendencia de bajas ligeras frente al dólar. Operadores agregaron que la divisa doméstica iría hacia la zona de 8,57 a 8,58 unidades.