PARÍS.- La caída de los precios del petróleo, el fin del "superciclo" de las materias primas y los estragos recientes del yihadismo en Francia, Nigeria y Oriente Medio ocuparán buena parte de los debates del Foro Económico Mundial, que se abre el miércoles en la localidad suiza de Davos.
Más de 2.500 participantes de unos 140 países, entre ellos más de cuarenta jefes de Estado y de Gobierno y una enorme cohorte de empresarios tendrán ocasión, del miércoles al sábado, de analizar la actualidad económica, política y tecnológica, ampliar su red de contactos y explorar posibles contratos y acuerdos.
Estarán protegidos, como cada año, por un impresionante dispositivo de seguridad dotado de unos 3.000 militares y numerosos policías.
La fuerte caída de los precios del petróleo, un rompecabezas para los países productores, será una de las cuestiones centrales de esta 45ª edición.
La caída generalizada de las cotizaciones de las materias primas, después de un "superciclo" de 12 años, será abordada en los debates sobre las perspectivas de América Latina, que estará representada por las nutridas delegaciones de Brasil, México, Colombia, Perú y Panamá. Además de numerosos ministros, habrá dos presidentes de la región, el peruano Ollanta Humala y el panameño Juan Carlos Varela.
El nuevo ministro brasileño de Hacienda, Joaquim Levy, será escuchado con especial atención por los dirigentes y empresarios reunidos en la estación alpina, deseosos de saber los derroteros que tomará en 2015 una economía brasileña estancada y con una elevada inflación, que en noviembre superó el techo del 6,5%.
En los debates previstos, los BRICS tendrán a priori menos protagonismo que en ediciones anteriores, en un contexto delicado para este grupo de grandes emergentes que acusan una fuerte ralentización, y donde Rusia, a las puertas de la recesión, aparece especialmente debilitada por la caída de los precios del crudo y las sanciones occidentales impuestas por su rol en el conflicto de Ucrania.