BUENOS AIRES.- El gobierno argentino respondió la pasada noche a las críticas de Washington a la economía argentina, que está en "muy mala forma" según la subsecretaria de Estado norteamericana para Asuntos del Hemisferio Occidental, Roberta Jacobson.
La Cancillería emitió un comunicado en el que afirmó que "Argentina no suele opinar acerca de las cuestiones internas de otros países aunque si critica y seguirá criticando la injerencia en los asuntos internos de otros países".
"Sin embargo, luego de las declaraciones de Jacobson es necesario señalar que la actual crisis financiera internacional, que generó que gran parte del mundo se encuentre 'en muy mala forma', se originó pura y exclusivamente en el corazón del sistema financiero estadounidense", señaló la Cancillería.
El Ministerio de Relaciones Exteriores consideró que "resulta curioso que los representantes de Estados Unidos se refieran al estado de la economía de los restantes países pasando por alto el influjo determinante que tienen sus propias decisiones de política económica sobre la economía mundial".
"Mas aun cuando Estados Unidos es desde hace años una economía de elevado nivel de endeudamiento -la relación entre la deuda y el PIB es del 105 por ciento-. A diferencia de Estados Unidos los restantes países toman al dólar como moneda de reserva internacional mientras Estados Unidos tiene el privilegio de emitirlo", afirmó.
La Cancillería señaló que la gran mayoría de los trabajadores estadounidenses "todavía se encuentra experimentando las mismas consecuencias de la crisis con pérdidas en sus ingresos y en el empleo".
"Antes de opinar sobre la realidad de otros países, los funcionarios de los Estados Unidos deberían ocuparse y preocuparse por la realidad de millones de sus compatriotas que todavía pagan las consecuencias de la aplicación irrestricta de los preceptos del famoso Consenso de Washington que, como su nombre lo indica, no fue precisamente concebido en alguno de esos países latinoamericanos sobre los que las autoridades estadounidenses tanto gustan de opinar", sostuvo.
El gobierno argentino dio cuenta en el comunicado de que su economía consta de un buen estado, que entre 2003 y 2014 registró un crecimiento económico promedio de 5,7 por ciento, con una tasa de inversión de 19,8 por ciento en 2014, entre otros puntos destacados.
"Como se observa, solo una visión parcial puede afirmar que la economía argentina se encuentra 'en muy mala forma'. Claro que Estados Unidos nos tiene acostumbrados a este tipo de excesos. En la misma exposición donde dio su interpretación de la economía argentina, declaró estar 'decepcionada' por el mayoritario rechazo de los países de la región al ataque sufrido por la hermana República de Venezuela por parte de Estados Unidos", remarcó.
"Tal como expresó la Argentina en la OEA sobre la amenaza a Venezuela nadie en el continente se olvida de Juan Bosch, Jacobo Arbenz, Salvador Allende, el asedio a los Sandinistas o la invasión a Grenada. Todos ellos, al igual que Venezuela, declarados una "amenaza a Estados Unidos" antes de sufrir las trágicas consecuencias que siguieron a las denuncias contra dichos líderes populares", precisó.
La Cancillería señaló asimismo que "tampoco se olvida el pueblo argentino que la última vez que los funcionarios de Estados Unidos vieron a Argentina en 'muy buena forma', durante la década de 1990, el país terminó en la peor crisis política, económica y social de su historia".
"Casi 12 años de una política económica autónoma, soberana e inclusiva nos han enseñado a todos los argentinos (a) no dejarse atemorizar por expresiones falaces de funcionarios extranjeros", concluyó.