CENTRO ESPACIAL/HOUSTON.- Los astronautas del transbordador espacial Atlantis ultimaban hoy sus últimas tareas previo a su retorno a la Tierra.
Los cinco astronautas y las tripulación de tres de la estación orbital Alfa planeaban intercambiar agua y otros suministros entre ambas aeronaves espaciales, luego de haber completado con éxito la instalación del laboratorio Destiny, que costó 1.400 millones de dólares.
Los astronautas también planeaban continuar los ajustes en los sistemas del Destiny, la pieza más cara e importante de la estación orbital.
Las 13 computadores del Destiny y otros equipo permitirán a la NASA relevar a los rusos en el control de la Alfa.
El transbordador Atlantis se apartará de la estación hoy y tiene previsto para el domingo su regreso a la Tierra.
La mayor parte de la misión, la instalación del laboratorio, fue terminada tras tres caminatas en el espacio de los astronautas Thomas Jones y Robert Curbeam hijo.
Jones y Curbeam conectaron una antena de comunicaciones adicional, y ajustaron las conexiones entre Destiny y un puerto de amarre acoplado al laboratorio durante la segunda caminata.
La tercera salida de ambos marcó la centésima caminata en la historia del programa espacial de Estados Unidos.
La NASA contempla que se harán necesarias otras 152 caminatas para poder completar la construcción de la estación, prevista para el 2006.
