LONDRES.- La británica "Dama de Hierro" Margaret Thatcher atacó el martes al Primer Ministro Tony Blair al asegurar que se comporta con debilidad ante Europa y que es un socialista de corazón.
La ex Primera Ministra, quien ganó tres elecciones seguidas, comenzó a hacer campaña en favor de su Partido Conservador cuando las encuestas de opinión aseguraron que el Partido Laborista de Blair obtendrá el 7 de junio una victoria arrolladora y que los conservadores enfrentarán una segunda derrota en cuatro años.
"Si hay un poderoso gobierno laborista, con una gran mayoría, entonces sería un triunfo socialista", dijo Thatcher al Daily Mail en una entrevista.
La Dama de Hierro acusó a Blair de haberle robado muchas de sus políticas para ganar la elección de 1997, pero dijo que desde entonces ha dado marcha atrás de manera furtiva.
"Hay un residuo de socialista en él, que lo hace pensar que el gobierno sabe más... quizás lo lleva en la sangre", agregó.
En apoyo al líder conservador William Hague, quien busca dar vuelta a las encuestas de opinión y remontar los 20 puntos que le lleva Blair de ventaja, Thatcher tronó contra los laboristas en temas claves como Europa y el euro.
Denunció la política de Blair con respecto a Europa como "devastadora" y dijo que "pensar que podemos ser absorbidos por Europa es algo que me resulta repugnante. Y voy a luchar contra eso mientras tenga aliento".
BLAIR FAVORECE COMPRIMISO CON LA UE
Blair favorece un mayor compromiso con la Unión Europea, apoya la entrada de Gran Bretaña al euro y dice que llevará el tema a un referendo si le parece que eso resulta en bien de la economía británica.
Hague por su parte ha dicho que Gran Bretaña se abstendría de entrar al euro al menos durante los próximos cinco años.
Thatcher, llamada la Dama de Hierro durante los años de la Guerra Fría, dijo que ella continúa oponiéndose a la idea de una moneda única para Europa.
"Si usted tiene una sola moneda, está usted dejando de lado su independencia. Su soberanía. Y eso no podemos permitirlo jamás", explicó.
La intervención de Thatcher parece que pondrá algo de interés en una campaña deslucida que lleva ya dos semanas sin nada nuevo, a excepción de la infinita repetición en la televisión local de las imágenes en las que el viceprimer ministro, John Prescott, golpea a un sujeto que le arrojó un huevo la semana pasada.
