Las fuerzas gubernamentales lanzan bombardeos constantes contra la población civil en Siria.
AP
EL CAIRO.- La cifra de víctimas de una nueva matanza atribuida a fuerzas leales al régimen sirio de Bashar al Assad, ocurrida en la localidad de Tremseh, en el centro del país, fue elevada este jueves a 150 personas, según grupos opositores.
El Observatorio sirio de Derechos Humanos y la Comisión General de la Revolución Siria señalaron que los fallecimientos se debieron a intensos bombardeos sobre esta localidad, situada en el bastión opositor de la provincia de Hama.
No obstante, otros organismos, como la red de activistas Comités de Coordinación Local, elevaron el número de muertos a 220.
La masacre de Tremseh se convierte en una de las más graves desde el inicio de la violencia en Siria en marzo de 2011.
Milicianos armados
La Comisión General de la Revolución Siria agregó que grupos de "shabiha", irregulares que apoyan al Gobierno, entraron en Tremseh bajo la protección de las fuerzas de seguridad y asesinaron a balazos y con armas blancas a civiles.
Más de 150 cadáveres fueron hallados en la principal mezquita y otros lugares de la localidad, según los opositores. Cientos de personas resultaron heridas, según el último recuento.
La red de activistas informó de que fuerzas del régimen abrieron fuego contra manifestantes que salieron a las calles a protestar por la matanza Tremseh en zonas próximas a la capital siria, como Mazeh o Asali.
Pese a los esfuerzos mediadores internacionales, Siria continúa en medio de una espiral de violencia que ha dejado miles de muertos desde que comenzaron las protestas contra el Presidente Al Asad.