NUEVA DELHI.- Pranab Mukherjee, de 76 años, el nuevo Presidente de India, prometió combatir la pobreza al jurar hoy su cargo como 13° jefe de Estado desde la independencia del país.
Mukherjee
se impuso en las elecciones parlamentarias celebradas la semana pasada.
Vestido de negro, el Presidente visitó durante la mañana los memoriales dedicados al padre de la independencia india, Mohandas (Mahatma) Gandhi, y a los antiguos primeros ministros Jawaharlal Nehru, Indira Gandhi y Rajiv Gandhi.
Luego recorrió, en limusina y acompañado por guardias montados, la céntrica avenida de Rajpath, desde donde entró en el Parlamento indio y juró su cargo, en el que releva a la hasta ahora jefa del Estado, Pratibha Patil.
Asistieron a la ceremonia el Primer Ministro, Manmohan Singh, y la líder del gubernamental partido del Congreso, Sonia Gandhi, además de diputados y los principales altos cargos del país, que se declara la mayor democracia del mundo (en número de habitantes).
"Nuestra misión es la misma que la de los padres de la Independencia. Se trata de eliminar la maldición de la pobreza y crear oportunidades para que los jóvenes puedan sacar este país adelante", declaró en su discurso.
También afirmó su voluntad de respetar el secularismo, la igualdad religiosa y la equidad económica, para que "los más pobres puedan sentirse parte de esta India en crecimiento".
También se declaró "emocionado" por su nueva responsabilidad política y prometió proteger la Constitución "no solo en espíritu, sino por encima de las divisiones de partidos y regiones".
"Como dijo Swami Vivekananda, la India no se levantará por el poder de la carne sino el del espíritu, no con la bandera de la destrucción sino con la de la paz y el amor", afirmó, entre aplausos de su bancada parlamentaria.
Vivekananda (1863-1902) fue un líder religioso que difundió la espiritualidad india en Occidente y promovió la renovación de su país. Fue uno de los inspiradores del Mahatma Gandhi y Rabindranath Tagore, entre otras insignes figuras del subcontinente.
"Guerra" contra el terrorismo
Mukherjee dedicó parte de su discurso a criticar la avaricia y la corrupción, un mal que se ha vuelto endémico en esa inmensa nación. También afirmó que el mundo se encuentra sumido en una nueva "guerra mundial" que se libra contra el terrorismo, y en la que alabó el papel jugado por las fuerzas armadas indias.
India enfrenta acciones armadas de grupos islámicos tanto en Cachemira, disputada con su vecino Pakistán, como en el resto del país, que se han traducido en sangrientos atentados como
el ocurrido en Mumbai en 2008, que dejó más de 120 muertos.
Mukherjee se impuso con comodidad al ex diputado Purno Sangma en la votación celebrada el jueves de la semana pasada, en la que participaron casi 5.000 legisladores del Parlamento central y las asambleas regionales.
El cargo de Presidente es de signo representativo y ceremonial, pero también tiene entre sus funciones el poder de encargar la formación de Gobierno, algo que puede ser fundamental si las elecciones de 2014 no arrojan un ganador claro.
Pranab Mukherjee era considerado uno de los "pesos pesados" del actual Gobierno, donde había trabajado hasta ahora como ministro de Finanzas. Se presentó como el candidato de consenso del gubernamental Partido del Congreso y sus aliados.
El nuevo jefe de Estado nació en 1935 en una familia de clase media en la región de Bengala, en el noreste de la India, y ejerció como profesor y periodista antes de decidirse a entrar en política dentro del socialista y laico partido de la familia Gandhi.
