EFE
WASHINGTON.- El presidente Barack Obama presionó el sábado a los republicanos a que respalden las políticas de vivienda que según la Casa Blanca ayudarían a los propietarios en problemas a refinanciar sus deudas y evitar las ejecuciones hipotecarias.
Obama culpa a los republicanos del Congreso por no aprobar una legislación que propuso en febrero, la cual reduciría las tasas crediticias para millones de prestatarios que no han sido capaces de superar onerosas hipotecas.
Los republicanos se han opuesto, citando entre otras cosas el costo estimado de 5.000 a 10.000 millones de dólares de la propuesta.
"Aquí estamos, siete meses después, todavía esperando que el Congreso actúe", dijo Obama el sábado en su discurso semanal por radio e internet, al tiempo que mencionó que los créditos hipotecarios están en su nivel mínimo histórico.
El Congreso entró en receso y no tiene previsto sesionar hasta después de las elecciones de noviembre.
"En lugar de preocuparse por ustedes (la ciudadanía), ellos (los republicanos) ya se habían ido a casa a preocuparse por sus campañas", dijo el presidente.
La presión de Obama se produce en momentos en que los precios han estado aumentando en Estados Unidos. Los precios nacionales de las viviendas aumentaron un 1,2% en julio, en comparación con el mismo mes del año pasado, de acuerdo con el índice de Standard & Poor's/Case Shiller difundido el martes.
En el mensaje republicano semanal, Vernon Parker, candidato al Congreso por Arizona, dijo que la tasa impositiva corporativa de Estados Unidos empuja los puestos de trabajo hacia el extranjero.
Indicó que está de acuerdo con el candidato presidencial republicano Mitt Romney y su compañero de fórmula, Paul Ryan, en "que tenemos que detener todas las inminentes alzas de impuestos y desarrollar un código fiscal a favor del crecimiento que genere trabajos en el país y mantenga los puestos de trabajo aquí".
