PARÍS.- El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, señaló que el principal riesgo que amenaza la recuperación que se empieza a constatar en Europa es de carácter político, y subrayó que "la unión política" es el objetivo que hay que marcarse.
En un artículo publicado hoy por el diario francés "Le Figaro", el titular puso el acento en que los "signos positivos" que se perciben en la economía deben incitar a seguir reformándola, lo que pasa en primer lugar por la unión bancaria que permita el flujo del crédito y evitar que los contribuyentes tengan que pagar la crisis bancaria.
"Lo que tenemos que hacer antes que nada es la unión bancaria que garantice que los contribuyentes dejen de estar en primera línea de la quiebra bancaria y contribuya a que se vuelva a prácticas normales en el préstamo a la economía y en particular a las pequeñas empresas porque el flujo de créditos a la economía todavía no es suficiente", argumentó.
También se pronunció por la supresión de "los obstáculos que dificultan la actividad de las empresas y de los particulares dinámicos y por explotar plenamente el potencial del mercado único".
Tras hacer hincapié en que el nivel de paro actual, con 26 millones de desempleados en la Unión Europea, "es económicamente no viable, políticamente inaguantable y socialmente inaceptable", el presidente del Ejecutivo comunitario lanzó un mensaje en dirección de los responsables políticos.
"En el estado actual de las cosas, con una recuperación frágil -dijo-, el mayor riesgo de deterioro que veo es de carácter político, y el papel de los Gobiernos es garantizar la seguridad y la previsibilidad que todavía les falta a los mercados. La constancia es lo más importante".
Se mostró convencido de que "todos necesitamos una Europa unida, fuerte y abierta" porque "en el mundo actual, la acción a nivel europeo es indispensable para proteger nuestras normas y valores".
A ese respecto, consideró que "Europa debe concentrarse en los campos en los que puede aportar un valor añadido máximo. Debe ser muy visible en los grandes retos, más discreta en las cuestiones de menor importancia".
De cara a las próximas elecciones del Parlamento Europeo, que se celebrarán en ocho meses, Durao Barroso hizo un llamamiento para evitar en la campaña las caricaturas y los discursos populistas sobre la construcción europea.