Kim Jong Un saluda al público, durante una parada militar realizada en septiembre de 2013. El otro hombre sin traje militar que aparece es su tío.
APSANTIAGO.- La noticia de que Jang Song-thaek, tío del líder norcoreano Kim Jong-un, había sufrido una brutal ejecución ordenada por su sobrino, apareció ayer en todos los medios del mundo, sobre todo por lo macabro que parecía.
Según las informaciones, Jang Song Thaek, quien era considerado como el segundo hombre al mando del país asiático, fue desnudado, arrojado en una jaula y comido vivo por una jauría de 120 perros hambrientos. El hombre fue hallado culpable de "intentar derrocar al Estado" y de estar involucrado en caso de corrupción.
Sin embargo, el periódico "Washington Post" se apresuró en desestimar la versión de la inhumana ejecución de Jang y publicó un artículo en el que Max Fisher, su bloguero sobre asuntos internacionales, entrega cinco razones que demostrarían que probablemente es falsa.
Fisher afirma que en realidad los detalles respecto a la muerte del tío de Kim Jong-un no son nuevos, y que antes de que ayer fueran conocidos por todo el mundo habían aparecido en medios de Hong Kong y Singapur.
A juicio del bloguero, aunque con cierta frecuencia Corea del Norte es escenario de noticias que parecen una locura, en esta ocasión hay cinco grandes razones para creer que la ejecución del ex número dos del régimen no ocurrió tal como se ha relatado.
Según Fisher, la primera gran razón que existe para dudar de la veracidad de la historia es la fuente de donde proviene. "La historia se originó en un periódico de Hong Kong llamado Wen Wei Po, que curiosamente publica la versión sin citar una fuente. A excepción de un par de casos, los medios de Hong Kong tienen la reputación de publicar historias sensacionalistas que no siempre son verídicas. Pero, incluso para esos estándares, Wen Wei Po es considerado muy poco fiable", argumenta el bloguero.
Asimismo, señala que es importante considerar que los otros medios chinos no han publicado nada sobre la versión desde que ésta salió a la luz hace casi un mes. "Todo el resto de los medios chinos se han apegado a la misma historia que todo el mundo tiene: que Jang fue asesinado con ametralladoras o armas antiaéreas", afirma Fisher.
La tercera razón esgrimida por el bloguero es que tampoco los medios de Corea del Sur han abordado la historia. "Muchos medios de noticias, grandes y pequeños, parecen estar tratando esta historia como algo tan poco probable, que estiman que ni siquiera vale la pena mencionarla. Y ellos lo sabrían", dice.
En cuarto lugar, Fisher sostiene que a pesar de que ha pasado casi un mes desde que surgió la versión, nadie la ha confirmado. "Ello, por sí solo, no es sorprendente, pero el hecho de que los medios asiáticos ni siquiera se han dignado a reconocer el reporte, dice bastante", asegura.
La última de las razones para no creer que Jang fue comido vivo por perros es que la versión de que haya sido ejecutado por un pelotón de fusilamiento es mucho más consistente.
A juicio del bloguero, muchos medios alrededor del mundo consideraron la historia como verdadera debido a que, por lo general, las noticias que provienen de Corea del Norte son tratadas como creíbles, sin importar lo extravagantes que sean.
"Sabemos tan poco de lo que realmente ocurre en ese país, y en especial dentro de la cabeza de su líder, que muy poco es refutable. Pero las cosas sobre las que sí sabemos son usualmente tan extrañas, que casi cualquier cosa puede parecer posible", argumentó.