La costa de la isla Sur concentra constantes varamientos de ballenas.
AP (archivo)SIDNEY.- Trece ballenas quedaron varadas durante las últimas horas en una playa de la bahía Golden, en la Isla Sur de Nueva Zelanda, informó el Ministerio de Conservación del país oceánico, que vigila que otros 50 ejemplares de la manada no se expongan al mismo peligro.
Las autoridades ambientales neozelandesas han estado en alerta desde que se avistó a un grupo de 60 ballenas cerca de Farewell Spit, donde a principios de enero 39 cetáceos murieron o fueron sacrificados tras quedarse varados en esa zona.
Del grupo avistado hoy, 13 ejemplares se quedaron varados a unos 7 kilómetros de la base de Farewell Spit y desde entonces los socorristas les echan agua salada para protegerlas del sol antes de intentar reflotarlas, con la subida de la marea, antes de que oscurezca.
El resto del grupo "aparentemente" se encuentra en aguas profundas y no corren el riesgo inmediato de quedarse varadas, según el último comunicado del Ministerio de Conservación neozelandés.
Farewell Spit parece ser una trampa para ballenas ya que además de la muerte masiva a principios de año, en 2012 más de cien cetáceos perdieron la vida tras quedarse varados en los bancos de arena de ese lugar en dos incidentes separados.