En Japón son constantes las protestas por la situación generada tras el accidente nuclear.
AFPTOKIO.- Una investigación realizada en torno a las consecuencias de la destrucción de la planta nuclear de Fukushima reveló un aumento en el número de casos de cáncer de tiroides entre jóvenes residentes de la zona.
Según las últimas estadísticas elaboradas por el comité de investigación sanitaria de dicha prefectura, se han detectado 57 casos de esta enfermedad en menores de edad.
Ello supone un incremento de siete casos respecto a los últimos antecedentes presentados en mayo pasado.
El informe corresponde a análisis hechos hasta el 30 de junio pasado e incluye que se han detectado 103 casos dudosos de este tipo de cáncer entre las 300.000 personas de la zona sometidas a análisis que eran menores de edad cuando se produjo la crisis.
El panel de expertos considera, sin embargo, que por el momento es "difícil" determinar si existe un vínculo causal directo entre la presencia de este desorden y las radiaciones emanadas desde la planta.
Los diagnosticados tenían un promedio de 14,8 años de edad cuando la central de Fukushima fue devastada por el terremoto y tsunami de marzo de 2011.
El antecedente revelado ahora equivale a una tasa de 30 casos de cáncer de tiroides por cada 100.000 personas, lo que contrasta con estadísticas de otras áreas de Japón en la que dicha tasa no llega a 1,7, según datos del diario "Asahi".
A partir de septiembre, cuando se espera que haya concluido la primera ronda de revisiones médicas, los especialistas evaluarán la totalidad de datos recogidos y la posible conexión entre las enfermedades y el accidente nuclear.
Las autoridades niponas decidieron examinar a unos 370.000 residentes jóvenes de la prefectura de Fukushima.
