SANTIAGO.- La Universidad Complutense de Madrid desmintió que Excálibur, el perro de Teresa Romero, la auxiliar de enfermería española contagiada por el virus del ébola, haya sido sacrificado en sus dependencias.
La información había sido dada a conocer por diario El Mundo de España, y fue este mismo medio el que tuvo que rectificarse.
Según la primera información, el can había sido ejecutado en el Hospital Veterinario de la Universidad Complutense de Madrid a las 14:30 horas (09:30 hora de Chile).
De acuerdo a este medio, durante la mañana de este miércoles llegó un camión al hogar que comparte Romero con su marido, Javier Limón, quien también se encuentra aislado al ser sospechoso de contraer la enfermedad. Ahí, dos personas con trajes blancos, aunque con las manos y caras descubiertas, habían ingresado al lugar.
Sin embargo, la propia casa de estudios envió un comunicado en el que explicitaba que "queda revocada la autorización para trasladar el cadáver de dicho animal a cualquier instalación de la UCM".
La información fue entregada horas después de un primer comunicado en el que se señalaba que "se ha autorizado a que el cadáver del perro Excalibur, que de acuerdo con los protocolos de intervención que se han diseñado en la Comunidad de Madrid, va a llegar a las instalaciones del Centro Visavet".
Tras esta aclaración, aún no se sabe qué pasará con el perro, luego que la justicia española autorizara ayer su ejecución, ya que podría ser un agente transmisor de la enfermedad a los seres humanos, porque según las autoridades sanitarias "vivía en estrecho y permanente contacto" con su dueña.
En tanto, en las afueras de la casa del matrimonio en Alcorcón se encuentran grupos animalistas protestando y exigiendo que no se sacrifique al can. Mientras, personal de emergencia y bomberos se encuentran en el lugar para retirar a Excalibur.