Dilma Rousseff tras ganar las elecciones del domingo.
AFPRÍO DE JANEIRO.- La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, reelegida el domingo para un nuevo mandato de cuatro años, afirmó este lunes que promoverá las reformas y los cambios que le pidieron los electores en las urnas, pero que lo hará convocando a todos los sectores políticos, económicos y sociales al diálogo.
"Tenemos que entender que toda democracia manda un recado de cambio en una elección. Y el recado que recibí de los electores es que, si acerté en algunas cosas, tengo que mejorar y hacer más. Fueron dos recados: cambio y reforma", afirmó la jefe de Estado en una entrevista a la televisión Record.
La mandataria, que ganó la segunda vuelta de las presidenciales este domingo con un 51,64 % de los votos frente al líder opositor Aécio Neves, que fue respaldado por el 48,36 %, dijo que está comprometida a buscar "los cambios y las reformas que Brasil exige".
En su primera aparición pública un día después de haber sido reelegida aclaró, sin embargo, que no promoverá reformas elaborando y anunciando un conjunto de medidas para poner en marcha en su segundo mandato sino tras un amplio diálogo para el que convocará a todo el país.
"No puedo hacer una lista de medidas y divulgarlas. El camino correcto es justamente la apertura de un diálogo", dijo.
"La actual situación del país permite abrir un espacio de diálogo, conversar con todos los sectores, ver las propuestas que están el la pauta. Cambios serán hechos. Ese fue el recado de los electores y ese mi compromiso", afirmó.
La presidenta agregó que convocará para ese diálogo a todos los sectores, aunque negó que el país haya quedado dividido en dos después de las elecciones más reñidas en la historia del país, en las que la oposición salió fortalecida con casi la mitad de los votos.
"Una democracia puede unir a personas con posiciones distintas. Y esa es la base de la petición que hice ayer en mi primer pronunciamiento: pedirle a las personas que llegó la hora de unirnos para garantizar un futuro mejor para Brasil", dijo.
Admitió que en las elecciones fueron defendidos modelos diferentes para el país por parte de los dos candidatos a la segunda vuelta, pero dijo que eso no impide buscar consensos.
"En todas las democracias maduras del mundo, cuando se habla de unión, no se habla de unidad perfecta de ideas ni de acción monolítica sino en la posibilidad de participar en un amplio diálogo en que las diferentes posiciones pueden ser evaluadas para conducirlas hacia un consenso, hacia un puente", dijo.
"Para que el país crezca, mantenga el nivel bajo de desempleo, combata efectivamente la inflación, es necesario abrir un diálogo amplio con todas las fuerzas productivas, con la sociedad y con el sector financiero. El clima ahora es de construcción de puentes y no de buscar diferencias", agregó.
Sobre la fuerte caída con que la bolsa de Sao Paulo reaccionó a su victoria en las urnas, Rousseff afirmó que las pérdidas fueron generalizadas en todos los mercados y no sólo en Brasil.
Agregó, no obstante, que las medidas exigidas por los inversores también serán objeto de un amplio diálogo, pero que primero hay que esperar que los mercados se calmen.
Sobre las especulaciones en torno al nombre del futuro ministro de Hacienda tras la decisión del actual titular, Guido Mantega, de renunciar a finales de este año por motivos personales, aseguró que decidirá al sustituto en el momento adecuado y que en este momento no pretende discutir nombres.
"Y no voy a discutir un sólo ministro, Discutiré mi Ministerio. Yo dije en la campaña que tendré un Gobierno nuevo con ideas nuevas", agregó al dar a entender que promoverá una amplia reforma en su Gabinete, aunque aún sin fecha determinada.
La mandataria también se refirió a las denuncias de corrupción en la petrolera estatal Petrobras con la que los opositores la cuestionaron durante la campaña y dijo que, incluso después de haber vencido las elecciones, investigará todo.
"Voy a investigar. Voy a empeñarme, duele a quien duela, no va a quedar piedra sobre piedra. Quiero que quede claro todo lo relativo a eso y a todos los otros asuntos sobre corrupción. Jamás hubo una acusación contra mí y no voy a dejar que, pasada la elección, se olviden las denuncias. Voy a empeñarme para que todo eso quede claro, duela a quien duela", afirmó.