TEL AVIV.- El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, llamó hoy a la calma luego de las tensiones registradas en Jerusalén y aseguró que su país no cambiará los acuerdos sobre los rezos en el Monte del Templo o la Explanada de las Mezquitas, lugar santo tanto para judíos como musulmanes en Jerusalén.
"Estamos comprometidos a mantener el statu quo para todas las religiones", dijo el primer ministro durante la reunión de su gabinete en un intento por evitar que aumenten las tensiones entre palestinos e israelíes.
"Es muy fácil prender el fuego de la religión. Lo difícil es apagarlo (...). Lo que ahora se necesita es calmar los ánimos", concluyó.
Las tensiones en Jerusalén brotaron después de que un palestino abriera fuego contra un activista de extrema derecha judío que pedía rezar en el Monte del Templo. La policía abatió al presunto autor de los disparos.
El Monte del Templo, la Explanada de las Mezquitas para los musulmanes, es un lugar sagrado tanto para musulmanes como para judíos. Linda con el Muro de las Lamentaciones. Según el statu quo que impera desde hace décadas, los judíos pueden visitar el lugar, pero no rezar allí. Sin embargo, sí lo pueden hacer junto al Muro de las Lamentaciones, que en realidad es la pared que sustenta el Monte del Templo y está reservada sólo para judíos.
La Explanada de las Mezquitas alberga la mezquita de Al Aqsa y la de la Cúpula de la Roca y es el tercer lugar santo de los musulmanes. Para los judíos es el más sagrado ya que contiene restos del templo judío.
Medios israelíes señalan hoy que las declaraciones de Netanyahu sobre mantener esos usos en la zona se producen a petición del secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, así como de Jordania.
Políticos moderados de Israel también instaron al primer ministro a que hiciese declaraciones en este sentido.
El presidente palestino, Mahmud Abbas, saludó la postura de Netanyahu como "un paso en la dirección correcta". Los ultranacionalistas israelíes, en cambio, solicitaron que el primer ministro anunciara un cambio que permita a judíos rezar en el Monte.
El diputado Moshe Feiglin, que lidera el ala más derechista dentro del partido conservador de Netanyahu, Likud, visitó hoy el Monte amparado en un amplio despliegue de las fuerzas de seguridad. Musulmanes enojados le gritaron a él y sus acompañantes.
En tanto, un comunicado de la oficina de Netanyahu señala que el gabinete aprobó hoy una enmienda al código penal israelí por la que se pueden imponer penas de hasta 20 años de prisión a quien lance piedras, especialmente contra coches.
Los palestinos muchas veces lanzan piedras en enfrentamientos con la policía israelí en Jerusalén oriental o a los coches que pasan a Cisjordania.
"Israel está tomando medidas contra los terroristas y aquellos que lancen piedras, bombas incendiaras o proyectiles", dijo Netanyahu. "Todo esto tiene como fin restablecer la calma y la seguridad en Jerusalén".
Por otra parte, 106 oficiales del Ejército israelí retirados publicaron una carta abierta en los diarios locales instando al gobierno a retomar las negociaciones de paz con los palestinos.