María Macarena Gelman hoy se dedica a buscar a su madre, aún desaparecida.
AFPMEXICO.- María Macarena Gelman, nieta del recién fallecido poeta argentino Juan Gelman, celebró las "muchas batallas" que libró su abuelo, especialmente la que ganó en 2000, cuando logró encontrarla entre los cientos de niños traficados por la última dictadura argentina, luego que sus padres fueran asesinados o desaparecidos.
"Él ganó muchas batallas (...) A pesar del dolor, la vida que tuvo, pudo hacer muchas cosas. Una de ellas, gracias a la ayuda de su esposa Mara (Lamadrid), fue encontrarme", dijo una conmovida Macarena durante el velorio en Ciudad de México de su abuelo.
"Lo pude conocer, pude compartir tiempo con él. Me hubiera gustado que fuera mucho más, pero hicimos lo mejor que pudimos", comentó la joven, a pocas horas de haber llegado a México desde Uruguay, donde reside.
El padre de Macarena e hijo de Gelman fue asesinado durante la última dictadura militar argentina (1976-1983) y su cuerpo fue encontrado en 1989. Su madre, embarazada de siete meses, fue llevada a un centro de detención para dar a luz, y la pequeña Macarena fue entregada ilegalmente a un oficial de la policía uruguaya.
Juan Gelman, quien tuvo que exiliarse desde 1975, dedicó largos años de su vida a la búsqueda de su nieta. "No sé si sos varón o mujer. Sé que naciste. Me lo aseguró el padre Fiorello Cavalli, de la Secretaría de Estado del Vaticano, en febrero de 1978. Desde entonces me pregunto cuál ha sido tu destino", escribió el poeta en 1995, en su "Carta abierta a mi nieto".
El reencuentro sucedió por fin en el año 2000. Macarena tenía 23 años cuando supo que no era hija de quienes la criaron y del calvario que sufrieron sus padres.
"Enterarse fue un shock y después mucho instinto de supervivencia", admitió Macarena, quien hasta entonces no había oído hablar de Gelman, y que ahora destina todas tus energías a buscar a su madre, aún desaparecida.
Sobre los últimos días de su abuelo, la joven cuenta que "hasta diciembre, que yo estuve con él unos días, estaba preocupado por escribir", pese a la recomendación de los médicos para que descansara. Hablaron por última vez el sábado, y recibió correspondencia suya un día antes del deceso, ocurrido el martes.
Gelman, fallecido a los 83 años, también se desempeñó como periodista, vereda desde la cual luchó contra la impunidad de las dictaduras militares del Cono Sur, sobre todo tras la desaparición de su nuera y el asesinato de su hijo.
En 1963, Gelman fue encarcelado por razones políticas, y desde 1975 vivió en un exilio que lo llevó a Madrid, Managua, Nueva York y finalmente a México.