SANTIAGO.- Es una escena inmortalizada en imágenes de archivo y en la memoria colectiva nacional: El futbolista Patricio Yáñez llevándose las manos a la entrepierna en 1989, para mostrar su ira hacia los hinchas brasileños, tras el supuesto bengalazo que tenía a Roberto "Cóndor" Rojas revolcándose en la cancha del estadio Maracaná.
Pero como si 25 años germinando en la cultura pop local no fueran suficientes, la acción conocida como "Pato Yáñez" ahora además quedará estampada para la posteridad en una obra de arte, como parte de la muestra "101 formas para nombrar un acá", que abre hoy sus puertas al público en la sede Quinta Normal del Museo de Arte Contemporáneo (MAC).
La exposición es una de las tres dedicadas al balompié que en estos días inician su andar en salas de Santiago, aprovechando el clima mudialista. Y en ella, el artista Nicolás Miranda busca plantear una reflexión estética sobre el fracaso, a partir de nuestros más recordados traumas futbolísticos.
Así es como está el gesto de Yáñez reproducido decenas de veces en figuras de resina, encabezando un recorrido que también tiene un lugar para esculturas de Carlos Caszely lamentándose tras perder el penal en el Mundial de 1982, y del propio "Cóndor" propinándose un corte en la frente.
La muestra estará abierta hasta el 17 de agosto, y no es la única que se podrá visitar en el MAC Quinta Normal. Allí también —y por el mismo período— se inaugura hoy "Fútbol. El juego sólo acaba cuando termina", una exposición colectiva que reúne fotografías e instalaciones en video de artistas provenientes de Argentina, Uruguay, Venezuela, Alemania, Brasil y China, entre otros países, además de Chile (de donde sólo figura Gianfranco Foschino).
La exhibición ya ha itinerado por otras ciudades de Sudamérica, ofreciendo una forma de ver el fútbol fuera de los grandes estadios, como símbolo del estado político, social y cultural de las sociedades. Como "metáfora de la vida real", según el curador Alfons Hug.
Así, entre las obras figura un retrato a la selección femenina de Afganistán, el registro de una pichanga nocturna en una favela de Río de Janeiro, o de dueñas de casa cosiendo pelotas en un barrio periférico argentino.
Ambas exposiciones se podrán visitar de martes a domingo en la sede del MAC ubicada en Matucana 464 (metro Quinta Normal), entre 10:30 y 18:30 horas, pagando una entrada general de $600, o de $400 para estudiantes y personas de la tercera edad. Los domingo, el ingreso es liberado.
Hasta balones pintados
Obras inspiradas en el fútbol, e incluso pelotas intervenidas, forman parte de otra muestra dedicada al balompié y al ánimo de Mundial, y que ayer viernes abrió sus puertas al público en la Galería Artium (Alonso de Córdova 3102).
Se trata de "Jogo Bonito", que hasta el 12 de julio y con entrada liberada exhibirá creaciones de artistas como Carmen Aldunate, Edwin Rojas, Lorenzo Moya, Alejandro Robles y Catalina Abbott, quienes se inspiraron en la selección mundialista para realizar sus obras.
En total son 40 piezas inéditas, entre las que predominan la pintura, el grabado y el dibujo, creados por los artistas tras la invitación de la galería, lo que supuso un desafío para varios de ellos, sobre todo los menos futboleros.
Y sobre todo para quienes decidieron usar auténticas pelotas de fútbol como superficie, entre ellos Vicente Rojas Ruggeri, quien cuenta que "comencé a relacionar el balón con un átomo, una célula... Una vez terminada, la obra es como un planeta".
La muestra es coronada por una obra de vieja data: "Matta Calcio", un grabado que Roberto Matta hizo para el Mundial de Italia 90, conformado por seis planchas de 60 por 60 centímetros, hasta totalizar nada menos que cuatro metros.