MDRID.- Los programas maliciosos contra el sistema operativo Android (de Google) para dispositivos móviles se incrementaron el 486% en 2013, respecto al año anterior, con un total de 1,2 millones de amenazas detectadas.
Las cifras, recogidas por la empresa de seguridad G Data en su último informe semestral -relativo al período de julio a diciembre de 2013-, desvelan que entre esos seis meses los nuevos programas maliciosos detectados contra la plataforma Android ascendieron a 673.000, con un nuevo récord negativo en el conjunto del año.
Según Eddy Willems, experto en seguridad de G Data, la industria del cibercrimen mantiene "a pleno rendimiento" su maquinaria de creación de amenazas y ha encontrado "un eslabón muy débil" en los teléfonos inteligentes y las tabletas electrónicas, que ahora almacenan tanta información como los PCs,
El 2014 parece que será el año del robo de datos en dispositivos móviles, con un aumento de ataques cruzados entre plataformas, así como estafas en torno a "bitcoins" u otras monedas digitales, que tanto interés despiertan entre los cibercriminales en el terreno de la movilidad, añadió.
Dentro de los programas maliciosos que pueden ser agrupados en familias de "malware", que representan casi la mitad del total, los troyanos constituyen el grupo más numeroso, el 80,9%, seguido de los "backdoors" (18,8%) y "exploits" (0,3%), según los datos.
Los troyanos, en el ámbito de la movilidad, están normalmente especializados en el robo de datos personales que más tarde se venden en mercados negros de internet, de acuerdo al informe.
Entre las amenazas sin clasificar, que suponen el 53,6% del total, se incluyen programas que no son estrictamente dañinos, pero que suelen esconder funciones espía y que especialmente se dedican a la repetición indiscriminada de anuncios. A menudo son difíciles de desinstalar.
De cara a este año, G Data advierte de la posible aparición de programas maliciosos capaces de robar monedas digitales directamente de teléfonos "inteligentes" y tabletas electrónicas con sistema operativo Android.
Asimismo, avisa de la previsible concentración de "energías" por parte de la industria del cibercrimen en el desarrollo de amenazas capaces de interferir en operaciones de banca "on line" mediante ataques multiplataforma y del robo de datos personales.