SANTIAGO.- Las osamentas halladas en el cementerio de Copiapó, en el norte chileno, presentarían fracturas ocasionadas antes o después de fallecidos, señaló el jueves el juez Juan Guzmán Tapia, quien investiga 190 querellas contra el ex gobernante Augusto Pinochet.
El magistrado que se encuentra en Copiapó, 675 km al norte de Santiago, dijo a la prensa que espera que los peritos del Instituto Médico Legal (Morgue) encuentren indicios que permitan identificar los cadáveres.
Las osamentas pertenecerían a Ricardo García, Benito Tapia y Maguindo Castillo, ex ejecutivos de la Corporación del Cobre de la División Salvador, que fueron ejecutados por la "Caravana de la Muerte", comitiva militar que fusiló a 75 presos políticos, en un recorrido por varias ciudades en octubre de 1973.
El juez Guzmán, que hace dos semanas ordenó el arresto de Pinochet en una decisión que fue anulada el lunes por la Corte de Apelaciones de Santiago, llegó el miércoles a Copiapó para comprobar la veracidad de los informes recibidos.
El hallazgo se produjo por casualidad cuando se verificaban sitios para construir nuevos mausoleos en el interior del camposanto, el cual permanece totalmente cerrado por efectivos de Investigaciones.
"Se encontraron osamentas y las razones ya están bastante explicadas. Estaban en uno de los sitios que quedaba sin aparentes tumbas. Se estaba profundizando el terreno a objeto de construir un mausoleo", dijo el juez Guzmán.
"Yo tengo esperanza que sí. Esta es la tercera vez que venimos en busca de él", dijo a la prensa Rolly Baltiansky, viuda del ex gerente de la División Salvador de Corporación del Cobre, Ricardo García, aludiendo a la posibilidad de encontrar los restos de su marido.
"Pero esta vez tenemos más esperanzas y más posibilidades. Hay como un 80% que pudiera ser y hasta que no se hagan las pruebas de ADN no vamos a estar cien por ciento seguros", agregó.
Los familiares de los tres ejecutivos de Codelco afirmaron que a sus parientes se les efectuó un consejo de guerra sin defensa y sus restos ingresaron en octubre de 1973 al cementerio municipal de Copiapó, pero nunca fueron encontrados.
El abogado Alfonso Inzunza, querellante en el caso "Caravana de la Muerte", dijo en Santiago que la comitiva militar -dirigida por el general en retiro Sergio Arellano Stark- llegó a Copiapó el 16 de octubre de 1973.
Indicó que desde las cárceles de Copiapó fueron sacados 16 presos y la mayoría de ellos fueron ejecutados, pero tres se mantenían como desaparecidos.
Especialistas del Instituto Médico Legal señalaron que los resultados definitivos del hallazgo podrán estar listos dentro de dos meses.
