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Tom Cruise

Con sólo 1,68 metros sus probabilidades de triunfar en el celuloide eran difíciles y lo sabía, pero increíblemente, las primeras negativas fueron porque no era suficientemente guapo.

Nacido en Syracusa, Nueva York, el 3 de julio de 1962, bajo el nombre de Thomas Cruise Mapother IV, su destino era ser un chico de clase media. Su padre, ingeniero eléctrico, arrastró a su mujer Mary Lee y sus cuatro hijos (tres mujeres y Tom) por diferentes estados buscando mejores expectativas de vida.

A la separación de sus padres, en 1974, que lo convirtió en el hombre de la casa, se sumaron el nuevo matrimonio de su madre y sus problemas de dislexia, que hicieron su adolescencia un poco compleja. Su paso por un monasterio franciscano de Cincinnati, donde estuvo catorce meses meditando, no lo desviaron de su meta de convertirse en actor.

A pesar de su gran capacidad deportiva, una lesión a la rodilla lo apartó rápidamente de esas pistas y lo empujó a participar de juveniles montajes teatrales que lo llevaron a Nueva York.

Debutó en 1981, a los 19 años, en el drama “Amor eterno” (Endless love), de Franco Zeffirelli, y luego vino “Más allá del honor” (Taps), donde compartió roles con Sean Penn y Timothy Hutton, y “Rebeldes” de Francis Ford Coppola.

Sus éxitos de taquilla y de fans le facilitaron los nuevos trabajos. “Negocios riesgosos” (Risky business) con su primera nominación al Globo de Oro, “Top Gun” y “El color del dinero” con Paul Newman lo consagraron. Pero “Nacido el 4 de julio”, de 1989, le valieron su primera nominación a un Oscar y obtener el Globo.

Los altos y bajos debido a película como “Días de trueno” y “Un horizonte lejano”, no lo detuvieron en sus deseos de ser grande en el mundo de Hollywood. En 1993 fundó una productora junto a Paula Wagner y se estrenó en ese papel con “Misión imposible”. Cuatro años más tarde, la compañía recibió la distinción Premio Nova a los productores más prometedores del largometraje.

Millonario, su inclinación por el misticismo lo encaminó nuevamente a la práctica de la fe en la Iglesia de la Cientología o Cienciología, fundada por Ronald Hubbard y que promueve el control mental para lograr la autodeterminación. Ingresó a ella acompañado de su ex esposa Nicole Kidman y tiene de compañeros a Mimi Rogers, John Travolta, Kristie Alley y Lisa Marie Presley, entre otros.

 

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