El Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos para América Latina y el Caribe, Latin NCAP, realizó una nueva jornada de evaluación de seguridad. En esta oportunidad, los modelos examinados fueron el Kia Rio Sedán y el Chevrolet Onix. Ambos obtuvieron bajos resultados, llegando a las cero estrellas.
Primero fue el vehículo de General Motors que consiguió el mínimo puntaje por protección de adultos y tres estrellas en infantil. El organismo evaluador, también sometió al modelo del fabricante norteamericano a pruebas de choque lateral. Allí, las conclusiones no fueron favorables, debido a que el ensayo demostró una comprensión alta en el pecho del ocupante adulto y también un alto impacto en la estructura.
"El Chevrolet Onix evaluado no cuenta con elementos de absorción de energía para colisiones laterales, sino que solo posee barras en las puertas. De esta manera, el hatchback de la marca no cumpliría con los requerimientos básicos de regulación para impactos laterales de las Naciones Unidas (UN95)", según informó la Latin NCAP.
Donde sí tuvo un óptimo veredicto fue en la protección para el pasajero infantil, aunque el vehículo posee sólo un cinturón de falda en la ubicación central trasera y no cuenta con sistema de anclaje Isofix.
Cero estrellas para el Kia Rio
La versión sedán y sin airbag del modelo de origen coreano también se sometió a evaluación y fue uno de los perjudicados con los resultados que otorgó Latin NCAP, recibiendo cero estrellas en protección del ocupante adulto y una para el pasajero infantil. Donde sí estuvo bien evaluado fue en el test de colisión frontal e impacto lateral, ya que tal como ha definido el organismo evaluador, posee una estructura estable.
A pesar de ello, la versión básica del Kia Rio Sedán no está equipado con airbags y frenos ABS (la opción de entrada que se vende en Chile sí cuenta con doble airbag). La ausencia de estos elementos sumado al bajo desempeño de los cinturones de seguridad, dan cuenta de las bajas conclusiones para la cabeza y pecho de los pasajeros delanteros. El automóvil de la firma asiática, consiguió una estrella en el cuidado del ocupante infantil, ya que no cuenta con anclaje Isofix o cinturones de tres puntas en todos los asientos.
Según Latin NCAP, Kia se ha comprometido a que, al menos, el nuevo Morning y Rio posean un airbag para el conductor en todas las variantes que se comercialicen en América Latina. Además, la marca coreana realizó un compromiso con el organismo evaluador para patrocinar el test del nuevo Rio Sedán, pero en la ocasión será probado el que cuente con bolsa de aire. De esta manera, esperan poder evidenciar la evolución en materia de seguridad que presenta su automóvil.
Expertos se manifiestan
Una de las entidades expertas en la materia es Automóvil Club Chile, que siempre está involucrada en este tipo de temas. Alberto Escobar, gerente de asuntos públicos de la empresa local y también miembro del directorio de Latin NCAP, admitió que “está comprobado que el nivel de seguridad de los automóviles dependen de las leyes que tenga cada país y es el Estado quien debe acelerar y establecer los parámetros para exigir que cada fabricante ofrezca vehículos seguros. El problema no está en los autos de alta gama, sino en aquellos modelos que acceden las familias de menores ingresos, que no pueden optar a seguros médicos o de vida, y que están obligados a pagar hasta un 30% más por las tecnologías que salvan vidas".
Asimismo, agregó que "Chile, al ser importador, tiene condiciones muy favorables en dirección a implementar las tecnologías de seguridad y mejorar las exigencias, pero no lo hace. Aquí se venden automóviles idénticos a los que se comercializan en otros continentes, pero con prestaciones de seguridad muy distintas, precisamente porque nuestra legislación actual permite que los autos que ingresen puedan homologarse por distintas normas, ya sea la brasileña, coreana, norteamericana o europea. Si existiera una norma técnica elevada en nuestro país, no existiría la presencia de autos “maquillados” que dicen cumplir con ciertos estándares de seguridad y que no son capaces de resistir a una colisión a 64 km/h. Si el país adoptara, al menos, seis normas de las más de 130 que propone la ONU para la seguridad vehicular, los consumidores tendrían la certeza, que indistintamente del origen de la marca o de la versión que compren, estarían adquiriendo automóviles aptos para protegerlos”.
Quien también tuvo palabras para el resultado de las recientes pruebas fue Alejandro Furas, secretario general de Latin NCAP, quien confesó que “es una gran desilusión para Latin NCAP que fabricantes líderes como GM y Kia sigan ofreciendo autos de cero estrellas en América Latina. Los consumidores se merecen mucho más que estos resultados que incumplen con los estándares por parte de empresas que saben perfectamente cómo fabricar autos mucho más seguros”.
Además, el ejecutivo añadió que “estos resultados tan poco convincentes deberían servir de lección a los gobiernos de la región y dejar claro que los niveles mínimos de seguridad no se pueden dejar en manos de los fabricantes. Es esta la razón por la cual Latin NCAP insta a todos los gobiernos de América Latina a adoptar de manera urgente los estándares de la ONU para los ensayos de impacto frontal y lateral. Es ahora el momento de tomar medidas para eliminar el flagelo de las trampas mortales que representan los autos de cero estrellas que los fabricantes siguen vendiendo dispuestos a ofrecer vehículos por debajo de los estándares que no podrían vender en Europa o América del Norte. Este tipo de doble discurso es inaceptable y debe terminar”.