SANTIAGO.- El ex presidente de la alianza Nissan-Renault-Mitsubishi, Carlos Ghosn, detenido en Japón por fraude financiero, sigue generando polémicas y ahora denunció "un complot y una traición" de los ejecutivos de Nissan que se oponían a la integración de Renault al grupo automovilístico japonés.
Sus declaraciones al diario económico nipón Nikke son las primeras desde su detención el 19 de noviembre y se realizaron desde la cárcel donde se encuentra detenido.
Ghosn rechazó además las acusaciones de que sus 19 años al frente del grupo fueran "una dictadura". "Tradujeron 'liderazgo fuerte' como 'dictadura', deformando la realidad para deshacerse de mí", dijo.
"El proyecto de integrar" Renault, Nissan y Mitsubishi Motors había sido discutido con el presidente de Nissan, Hiroto Saikawa, en septiembre de 2018, indicó Ghosn.
El dirigente aseguró no tener "ninguna duda" de que las acusaciones contra él, que volvió a negar, son el resultado de "un complot y una traición".
Nissan reaccionó a las declaraciones de Ghosn diciendo que Saikawa ya había "categóricamente rechazado la noción de 'golpe de estado'".
La investigación secreta llevada a cabo en 2018, "reveló pruebas significativas y convincentes de malversaciones", agregó Nissan en una declaración a la AFP.
Carlos Ghosn es objeto de tres inculpaciones por abuso de confianza y disimulación de ingresos a las autoridades bursátiles entre 2010 y 2018.
En su única comparecencia ante un tribunal, el 8 de enero, negó las acusaciones. Sus abogados hicieron varias demandas de liberación bajo fianza, sin éxito, porque la justicia argumentó que existe riesgo de disimulación de pruebas y de fuga.
"No me escaparé, me defenderé", dijo. "Todas las pruebas están en Nissan y Nissan impide a hablar a los empleados", sentenció.