La industria automotriz ha vivido una verdadera catástrofe los últimos meses como resultado de la propagación del nuevo coronavirus. Las ventas de unidades nuevas han caído a niveles históricos en un escenario marcado por el cierre de concesionarios y fábricas. A raíz de eso, la Unión Europea explora la posibilidad ir en ayuda de la industria mediante un potente paquete de incentivos para reactivar la compra de “vehículos eficientes”.
Según se informó, la primera parte de este plan de incentivos se podría traducir en una inversión cercana a los 22 mil millones de dólares, para alcanzar los 109 mil millones de la divisa estadounidense al finalizar el programa.
Se indicó además que los detalles del plan de ayuda se definirán en las próximas semanas una vez que la Unión Europea defina qué vehículos entran en la categoría de “eficientes”.
En esa línea, se informó que las autoridades de transporte de Alemania están presionando a sus pares de la UE para que incluyan en ese paquete de ayudas a todos los modelos que emiten hasta 140 gr/km de CO2 y que están muy por sobre los 95 gr/km que se exigirán como máximos a partir de 2021, según se acordó antes de la pandemia.
La posición germana ha sido calificada como inaceptable por algunos sectores que han asegurado que de acogerse la propuesta se dañaría gravemente a los fabricantes de automóviles que ya trabajan para alcanzar los nuevos estándares de emisiones de CO2 para el año que viene.
Jaguar pide ayuda al gobierno británico
Un claro ejemplo del negativo impacto que ha tenido el Covid-19 en la industria automotriz mundial lo da el fabricante Jaguar Land Rover, el que actualmente negocia con el gobierno británico un rescate financiero para superar la crisis sanitaria.
Según informan medios de prensa, durante las últimas semanas los ejecutivos de la automotriz han sostenido una serie de reuniones con autoridades del Ejecutivo a fin de conseguir un crédito del estado para afianzar su liquidez en este complicado e incierto escenario mundial.
Se precisó además que el fabricante de autos estaría solicitando poco más de 1.100 millones de dólares al gobierno británico.
Si bien desde la automotriz reconocieron que durante el último tiempo han mantenido una constante comunicación con el gobierno del Reino Unido, rechazaron comentar detalles “privados o confidenciales”.