El piloto automático aún no está permitido en países en la Unión Europea, por lo tanto, cobra relevancia que Mercedes haya conseguido la primera certificación comunitaria, para un sistema de conducción autónoma de Nivel 3 (los actuales son de Nivel 2).
No obstante, el logro viene con ciertas limitaciones, ya que solo puede activarse en autopistas que tengan una separación física central entre los carriles de circulación, y a velocidades de hasta 60 km/h, restringiendo así su uso en situaciones de tráfico denso.
De todas maneras, la certificación marca un claro paso adelante, porque el conductor ahora podrá activar el sistema y despreocuparse de lo que ocurre en el tránsito e incluso dejar de manejar el vehículo. Esto, por supuesto, en el caso de que se cumplan todas las condiciones ya mencionadas.
Este sistema permite al auto ocuparse de todo, desde acelerar, frenar, girar, mantener la distancia de seguridad y cambiar de carril, hasta realizar una maniobra de esquiva de emergencia, en el caso de ser necesario. Mientras tanto, el conductor puede recostarse en el asiento y leer un libro; pero no podrá dormir, para eso se necesitaría un Nivel 4.