McLaren regresa al Gran Premio de Estados Unidos con la intención de captar la atención con sus monoplazas que combinan elementos clásicos y modernos. Como parte de su colaboración con Google, el equipo británico de Fórmula 1 anunció que los MCL38 de Lando Norris y Oscar Piastri lucirán una decoración "Chrome", además de integrar inteligencia artificial y dispositivos de la compañía.
Esta estética, que ya debutó en el Gran Premio de Gran Bretaña la temporada pasada, regresa en Austin, Texas, como parte de la campaña "Chrome Shines Again" ("El cromo brilla de nuevo"). Su diseño busca rememorar los días de gloria de McLaren, con un toque contemporáneo que combina el acabado metálico con los característicos colores anaranjados que han definido a la marca en las últimas temporadas.
La colaboración entre McLaren y Google va más allá del diseño de los autos. Desde que ambas marcas se unieron, la tecnología y los productos del gigante tecnológico han desempeñado un papel crucial en las operaciones del equipo británico. Uno de los pilares de esta alianza es el uso de dispositivos Android con capacidad 5G y del navegador Chrome, herramientas que el equipo emplea tanto en las carreras como en el Centro Tecnológico de McLaren.
Esta integración tecnológica no solo busca mejorar la eficiencia operativa del equipo, sino también impactar el rendimiento durante las carreras mediante el uso de teléfonos, tabletas y relojes inteligentes. Un ejemplo de ello fue lo sucedido en Qatar, donde el equipo de boxes pudo analizar rápidamente los videos de las prácticas y compartir información en tiempo real para optimizar cada fase de las paradas en boxes.
Además, McLaren y Google están colaborando en el uso de inteligencia artificial para optimizar recursos y mejorar la eficiencia de los procesos operativos. Esto incluye desde la gestión de datos hasta el análisis de patrones de rendimiento.
De esta manera, queda claro que la presencia de la compañía multinacional en McLaren se expande cada vez más. Esta temporada, la colaboración incluye el uso de dispositivos Google Pixel, con el objetivo de mejorar aún más la conectividad y la capacidad de análisis del equipo. Estos aparatos, junto con otros, permiten recopilar y procesar datos en tiempo real, mejorando la capacidad de reacción ante cualquier eventualidad en la pista.