Los fanáticos de los motores de alto rendimiento recibieron una buena noticia luego que el grupo automotriz Stellantis -al que pertenece las marcas estadounidenses Dodge, RAM, Jeep y Chrysler- decidido volver a fabricar su icónico motor HEMI V8, una mecánica que había sido descontinuada bajo la dirección de su anterior CEO, Carlos Tavares, quien apostó por la transición a la electromovilidad.
Según dijeron fuentes de la compañía al sitio Mopar Insiders, la producción de estos motores, que hasta su término estaba centrada en México, comenzará en agosto de este año en la Planta de Motores Dundee, en Michigan, a fin de evitar los aranceles anunciados por Donald Trump al vecino país.
El regreso del HEMI V8 se venía rumoreando desde principios de 2025, impulsado por la visión de Tim Kuniskis, actual responsable de RAM y ferviente defensor de estos motores.
Trascendió además que se producirán tres versiones: el 5.7 litros, el "Apache" de 6.4 litros y el HEMI HELLCAT V8 sobrealimentado de 6.2 litros. Estas mecánicas mantendrán la arquitectura Gen 3 de Stellantis con algunas mejoras.
La decisión de eliminar los motores V8 había sido tomada por Tavares en su estrategia de recorte de costos y transición hacia la electrificación. Sin embargo, esta medida no fue bien recibida en el mercado norteamericano, donde la demanda por los V8 sigue siendo alta.
De hecho, las ventas de RAM y Dodge se vieron afectadas en 2024, con caídas del 16% y más del 50% en algunos modelos como el Charger.
Se espera que el HEMI V8 vuelva a equipar modelos como la RAM 1500, la Dodge Durango, el Jeep Grand Cherokee y el Jeep Wrangler Rubicon. Sin embargo, su regreso a los muscle cars como el Dodge Charger aún es incierto, ya que su nueva plataforma no es compatible con este motor sin modificaciones importantes.
Aunque Stellantis aún no ha hecho un anuncio oficial, todo indica que la compañía ha acelerado los planes para traer de vuelta al HEMI V8 en respuesta a la demanda del mercado estadounidense.