DeMarcus Cousins enfrenta una rehabilitación por otra lesión grave, y los Lakers han sufrido su primer problema grande previo al arranque de una temporada en la que aspiran al campeonato.
Cousins fue diagnosticado el jueves con un desgarro en el ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, una lesión que podría dejar en la banca al seis veces seleccionado al Juego de Estrellas de la NBA por gran parte -si no es que toda- de la temporada. El agente de Cousins, Jeff Schwartz de Excel Sports Management, dijo que todavía están discutiendo la fecha en la que el jugador se sometería a una cirugía.
Hace unos días, Cousins se lesionó durante un entrenamiento en Las Vegas. El desgarro del ligamento cruzado anterior se produjo aproximadamente 18 meses después de que se rompió el tendón de Aquiles izquierdo y luego de casi cuatro meses de que se desgarró el cuádriceps izquierdo.
Todas esas lesiones anteriores le costaron varios juegos y mucho dinero.
El desgarre en el tendón de Aquiles precedió el viaje de Cousins a la agencia libre en 2018, uno que podría haberle conseguido un contrato de varios años y que superara los 100 millones de dólares. Terminó firmando un acuerdo por un año y 5,3 millones de dólares con Golden State.
Los Lakers, aún sin contar con Cousins, siguen considerando que cuentan con talento más que suficiente para poner fin a una racha de seis temporadas consecutivas sin llegar a la postemporada, que es por mucho la más larga en la historia de la franquicia.