Un partido realmente increíble. Tuvo todos los aderezos de una final y se dio con un final de infarto y con cierta polémica.
Sí, porque el anfitrión
Brasil remontó ante México, lo venció por 2-1 y se proclamó campeón del Mundial Sub 17.
Fue un duelo que se jugó con los dientes apretados. Desde el principio, el "Scratch" jugó a gran ritmo: Kaio Jorge, Joao Peglow y Gabriel Veron causaban estragos en una zaga azteca que le costaba contrarrestar el poderío local.
De hecho, México no tuvo llegadas claras en la primera parte y solo la impericia de los atacantes brasileños hizo que el partido se fuera al descanso sin goles.
En el complemento, Brasil salió a jugar sin el mismo vértigo y esto lo aprovecharon los aztecas: A los 65', Bryan González se elevó más alto que todos y puso increíblemente la apertura de la cuenta. La primera llegada, el primer gol.
Pero Brasil no se desmoronó. Machacó y machacó y llegó su premio. Eso sí, gracias al VAR. Luego de una jugada de peligro, México suspiraba. Sin embargo, el árbitro fue a la ayuda tecnológica y se percató de una clara falta dentro del área. Penal.
Kaio Jorge a los 82' puso el empate y el local se agigantó. Siguió amenazando el área de un elenco azteca que aguantaba como podía. Cuando el partido terminaba, a los 90+3', Lazaro, quien había entrado en el segundo tiempo, impactó dentro del área un gran centro de Yan Couto y desató la algarabía brasileña.
Brasil se proclamó, celebró, y consiguió su cuarto título en esta categoría. Quedó a uno de Nigeria (5).