Un nuevo bochorno. Otra vez la violencia gana y el fútbol pierde. El balompié nacional se sigue ensuciando.
El duelo entre Colo Colo y Universidad Católica fue suspendido luego que un fuego artificial hiriera a Nicolás Blandi al minuto 71. A esa altura los cruzados ganaban 2-0 en el Monumental. Ya en el primer tiempo también vino el primer aviso. Una serie de bombas de ruido hicieron que el encuentro se detuviese algunos minutos. Luego de la interrupción el juego se reanudó.
El primer tiempo estuvo marcado por un polémico penal que no fue cobrado para la UC. La falta fue sobre Edson Puch, pero el juez decidió no sancionar, incluso tras ir a ver al VAR.
Pero los cruzados no decayeron y en la primera jugada del complemento lograron abrir la cuenta tras un certero cabezazo de Luciano Aued.
A los 68' César Pinares puso el 2-0 tras un potente remate cruzado. Ese fue el golpe de gracia. El Cacique no encontraba respuesta y Mario Salas menos.
El segundo tanto de los precordilleranos hizo que otra vez se sintieran con fuerza las bombas de ruido y poco después vendría el punto lamentable de la jornada.
A los 71' un fuego artificial cayó a la cancha y muy cerca de Nicolás Blandi. Tras intentar evitarlo, finalmente el delantero argentino cayó al suelo y terminó con un corte en la pierna.
La situación no daba para más. El árbitro suspendió el partido temporalmente, pero más tarde lo haría oficial. Lamentable.
Otra vez la violencia le gana al fútbol y ahora será la ANFP la que deberá decidir qué pasa con el tiempo restante. Lo que sí se anticipan son fuertes sanciones para Colo Colo.