El ciclismo de pista de los Juegos Panamericanos de Santiago 2023 se realizó en el remozado
velódromo ubicado en el parque Peñalolén.
El recinto fue inaugurado en 2014 para los Juegos Sudamericanos. Previo a estos juegos, se invirtió una alta suma de dinero para arreglarlo y fue entregado pocos días antes de que iniciaran las competiciones.
La organización mostró orgullo. En la página definieron al velódromo como "una verdadera joya, de nivel mundial y muy rápida".
Los corredores extranjeros también le dedicaron elogios, aunque consideran que las condiciones de aislación térmica deben ser mejores.
"El velódromo me parece que es muy cómodo. Con referencia a otros velódromos del mundo, está muy bueno. Lo único es que con el clima la pista se siente un poquito fría, por ende, es un poco más duro de romper el viento. Con un poquitico más de calor, como un día de entrenamiento que tuvimos, realmente se sentía rápida la pista", le dijo a Emol Carlos Echeverri, colombiano ganador de la medalla de plata en la prueba de velocidad por equipos.
"Lo del clima afecta el protocolo que tenemos para calentar, pero haciendo los debido arreglos no hay ningún problema. Está muy bueno el velódromo, tiene muy buena geometría para velocidad y todo. No más el único problema es el clima. Los camarines súper bien, muy bonito todo", agregó el mexicano Jafet López, quien se llevó un bronce de la capital chilena.
Mariano Lecaros, integrante de la selección chilena, opinó en la misma línea.
"Se hizo un buen arreglo en la pista. Quedó rápida. El clima influye. He estado en velódromos totalmente sellados y es una experiencia distinta. Pero aquí influye el clima y eso le da otra emoción", manifestó.
Para la ciclista chilena Paula Molina, en cambio, las transformaciones en el velódromo tampoco son tan grandes respecto a lo que había.
"Es lo mismo que siempre, solamente lo pintaron y lo lijaron. Pero ahora tenemos partidores. Así que rescatar que va a quedar eso para poder seguir entrenando y mejorando", declaró.
