A sus 25 años, la carrera de Cristóbal Campos queda en el aire. Un grave accidente de tránsito pone en jaque la continuidad del portero en el fútbol profesional.
El portero de San Antonio Unido y ex Universidad de Chile sufrió una "amputación traumática" de su pie derecho. Entró a pabellón y la cirugía fue exitosa tras más de cuatro horas de una compleja intervención.
"Fue posible reconstruir la extremidad y tenemos viabilidad de la extremidad", detalló Jorge Ibáñez, subdirector médico de la ex Posta Central.
¿Y qué viene ahora para el portero?
La situación es compleja. Lo primero es ver cómo evoluciona Campos a la operación. Luego ver las consecuencias de las otras lesiones que provocó el accidente.
"Esto es algo muy dinámico, se está evaluando continuamente, esto puede ir cambiando por la gravedad de la lesión. Uno no puede garantizar la viabilidad en el largo plazo. Tiene otro tipo de lesiones que lo vuelven un paciente crítico, aunque no está en riesgo vital. No se puede garantizar un pronóstico", explicó Ibáñez.
¿Podrá volver al fútbol?
Al doctor Ibáñez se le consultó por un futuro regreso de Campos al deporte profesional profesional. Fue muy cauto.
"Repito. No puedo realizar ningún tipo de pronóstico en este momento porque es algo muy dinámico", respondió el profesional. La evolución a la reconstrucción del pie será clave, precisó.
También el presidente de San Antonio Unido, Guillermo Lee, habló de la situación.
"La operación no asegura, en definitiva, que el diagnóstico final pueda varias, pero sí abre una esperanza, que es a lo que nosotros nos queremos aferrar. El doctor nos explicaba que esto puede cambiar minuto a minuto, tanto para bien como para mal", señaló.
Y agregó: "Según nos mencionó el doctor, esto puede funcionar, como eventualmente no. Nuestra esperanza es que sea de forma positiva y que el jugador pueda, no sé si seguir jugando fútbol, pero, al menos, llevando una vida un poco más normal y sin sufrir la amputación de su pie".
El doctor Felipe Chaparro, traumatólogo del Centro de Tobillo y Pie de Clínica Universidad de los Andes, dio su mirada médica y entregó más antecedentes del caso.
"El proceso de recuperación depende mucho del diagnóstico final. Aún es muy temprano para definirlo. No sabemos cuáles son las estructuras involucradas. En muchos casos lo que marca el pronóstico es al final el estado neurovascular, el daño de los nervios que transmiten la sensibilidad de la parte motora", argumentó a Emol.
"Cuando se dañan esos nervios, el particular el neurotibial, que es el más importante, el pronóstico en general es malo. Eso es de muy difícil recuperación. Si la parte neurovascular está indemne y es solamente daño de partes blandas y óseo, el pronóstico, eventualmente, podría ser mejor. Depende de muchos factores, de cuán dañada esté la articulación, los huesos, si las partes blandas como la piel tienen buena cobertura, si hay algún proceso de infección", añadió.
Consultado sobre plazos, el doctor Chaparro también fue cauto: "Hay muchas variables que determinan el pronóstico y el tiempo de recuperación. Esto es reciente y no se puede saber muy bien el registro del jugador".
