Una situación muy complicada es la que vive el defensa chileno Guillermo Maripán, no solo por el mal momento de la Selección tras la caída ante Paraguay por las Clasificatorias.
Además de tener problemas físicos que podrían dejarlo al margen del choque ante Ecuador (martes, 21:00 horas), el futbolista del Torino de Italia está envuelto en una polémica fuera de la cancha.
La popular influencer Carmen Castillo, mejor conocida como "Carmen Tuitera", acusa a Maripán de querer "difundir videos íntimos".
"No voy a hablar de él. Le voy a mandar un mensaje a Guillermo Maripán: enviar videos íntimos de mujeres está penado en Chile, así que cuidado con la información que comparte", dijo en el podcast "Bombastic".
En esa línea, Castillo reveló que habla con varios futbolistas nacionales, pero que el ex Universidad Católica intentó algo más: "Usted no se metió con una mina que se calla por una cartera, se metió con Carmen culiá (sic)".
Y cerró: "Si no sigo hablando más es porque lo necesitamos en la Selección chilena, porque tengo más".
AML Defensa de Mujeres asume defensa de Carmen Castillo
No solo eso, la oficina AML Defensa de Mujeres confirmó que va a representar a Carmen Castillo en este caso.
Mediante un comunicado indicó que "la difusión no consensuada de material íntimo constituye una grave vulneración de los derechos de las mujeres y está sancionada por la legislación chilena, con penas que incluyen privación de libertad".
Además, el escrito señala que "en la ley integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia de género, se tipifica como forma de violencia de género la violencia simbólica, que es la comunicación o difusión de imágenes, sonidos o textos por cualquier medio de comunicación".
"La difusión no consensuada de material íntimo es una grave vulneración de los derechos de las mujeres y está penada por la ley", señala la socia abogada Francisca Millán.
"Los medios de comunicación tiene una tremenda responsabilidad en cómo abordar estos casos, y deben hacerlo con el interés de proteger a las víctimas y no revictimizarlas. Es crucial que la sociedad comprenda la seriedad de estos actos y respete la privacidad de las personas involucradas", completó.
