La actriz de "Desperate Housewives"
Felicity Huffman fue sentenciada el viernes a 14 días de prisión y 15.000 dólares (unos $10.700.000)
por haber
pagado para alterar los resultados de la prueba de aptitud académica de su hija, en un escándalo que atrapó a docenas de padres ricos y famosos.
Huffman, de 56 años,
se convirtió en la primera sentenciada de los 34 padres en el caso.
También recibió una multa de 30.000 dólares (unos $ 21 millones), 250 horas de servicio comunitario y un año de libertad vigilada.
Antes de la sentencia, la actriz describió entre lágrimas cómo su hija le preguntó por qué no había confiado en ella.
"Lo único que puedo decir es que lo siento, Sophia", dijo Huffman. "Tuve miedo. Fui estúpida, y estuve muy equivocada. Estoy profundamente avergonzada por lo que hice. Causé más daño del que pude haber imaginado. Ahora veo todas las cosas que me llevaron por este camino, pero básicamente ninguna de las razones importa porque al final del día yo tenía una opción. Pude haber dicho que no", sostuvo.
En total, 51 personas han sido acusadas en el ardid, el mayor escándalo de admisiones universitarias que haya procesado el Departamento de Justicia estadounidense.
Los fiscales habían recomendado un mes de prisión para Huffman, mientras que sus abogados buscaban libertad condicional.
Al abogar por su encarcelamiento, el vicefiscal de distrito Eric Rosen dijo que los fiscales no tenían razones para dudar los motivos expresados por Huffman -sus miedos e inseguridades como madre- para participar del fraude.
"Pero con todo respeto a la acusada, bienvenida a la maternidad", dijo Rosen. "La maternidad es aterradora, agotadora y estresante, pero eso es lo que atraviesa cada padre... Lo que no hace la maternidad es convertirte en delincuente, no te hace hacer trampa. De hecho, te hace querer servir como un modelo de conducta positivo para tus hijos", agregó.
El abogado de Huffman, Martin Murphy, argumentó que el delito de su cliente fue menos serio que el de los coacusados, apuntando que pagó un monto menor (15.000 dólares) y que, a diferencia de otros, no involucró a su hija.
El escándalo ha enredado a universidades de renombre que incluyen Yale, Stanford, Georgetown y UCLA. Expuso hasta dónde son capaces de llegar los padres para ver a sus hijos en la universidad "correcta" y reforzó las sospechas de que el proceso de admisiones universitarias favorece a los ricos.
Los fiscales dijeron que los padres manipularon resultados de pruebas y sobornaron a entrenadores, para que reclutaran a sus hijos como deportistas de disciplinas que ni siquiera practicaban.
Huffman se declaró culpable en mayo de un cargo único de asociación ilícita y fraude como parte de un acuerdo con la fiscalía.
Quince padres se han declarado culpables y 19 han rechazado las acusaciones.
Entre estos últimos está la actriz de "Full House" ("Tres por tres") Lori Loughlin y su esposo, el diseñador de modas Mossimo Giannulli, acusados de pagar 500.000 dólares para que sus dos hijas ingresaran a la Universidad del Sur de California como falsas deportistas.