El 02 de septiembre de 2019, la organización del Festival de Viña del Mar daba a conocer quién era la primera artista confirmada de la edición número 61 del evento, a la vez que confirmaba que la animación recaería una vez más en María Luisa Godoy y Martín Cárcamo.
En ese momento, nada hacía presagiar que poco más de un mes después el surgimiento del estallido social que se prolongó por varios meses, iba a poner en duda la realización del certamen que finalmente se concretó, aunque con el fantasma de las manifestaciones siempre presente.
Y ahora, la
pandemia del coronavirus se transformó en una
nueva amenaza para el evento, cuya versión 2021 aún no ha sido confirmada por los organizadores. Incluso
la participación de TVN -que ya decidió no seguir con el Festival de Olmué-
está en duda y el directorio de la señal estatal debe decidir si continúa adelante o no.
Según informó El Mercurio a fines de junio pasado, el directorio de TVN trataría el tema en su reunión del 2 de julio. Sin embargo, eso no ocurrió y,
según señalaron fuentes a Emol, hasta ahora no hay nada decidido.
Quien tiene bastante claro lo que debería pasar es
Sergio Riesenberg, ex director del Festival de Viña entre 1981 y 1990, y que incluso ganó un Emmy por su trabajo, quien
asegura tajante que la versión 2021 del evento debe ser cancelada.
"Pienso que
no debería realizarse, salvo que pretendan repetir el fiasco del año anterior,
que lo único que logró fue desprestigiar al que es considerado el más importante certamen musical de América y, tal vez, del mundo", indicó a
Emol.
A juicio del ex director,
el evento no puede seguir presentando artistas menores, que -dice- "
serían los únicos en atreverse a venir a un país que, si la pandemia deja de ser amenaza, lo más probable y casi seguro esté enfrentando un nuevo estallido social cuyas proporciones resulta imposible de dimensionar".
"Se avecina un plebiscito y no sabemos ni cómo se hará y menos si será posible llevarlo a cabo. Se anuncia el regreso del fútbol para menos de un mes. ¿Están seguros? ¡Basta!
Actuemos con responsabilidad", agrega Riesenberg.
La televisión durante la pandemia
El ex director también
aprovecha de criticar la "alarmante" falta de creatividad de la televisión actual, que durante la crisis sanitaria solo ha repetido éxitos del ayer.
"Cero aportes de nuestros directores, que solo demuestran talento y oficio en la realización de teleseries.
No ha surgido ningún programa que más tarde -superados estos momentos de crisis-
podamos recordar y mucho menos admirar", señala.
En el mismo tono se refiere a
los matinales, "todos con esquemas iguales, repitiendo a diario a los mismos invitados que deambulan de un canal a otro".
En medio de sus críticas a la televisión,
Riesenberg disfruta del éxito que ha tenido "Pequeños grandes detalles", su última novela, que invita a leer "como forma de evasión".
En ella, el ex director cuenta historias que juegan con la realidad y la ficción, con
una estructura que se asemeja a un guion cinematográfico. Se encuentra en Amazon, tanto en versión física como digital.
