"Los Colonos" ha tenido una larga carrera desde su obtención del premio Fipresci, de la selección oficial del Festival de Cannes, en mayo del 2023. Este jueves 18 de enero, casi 8 meses después, tiene su esperado estreno en las salas nacionales de todo el país y es, definitivamente, una experiencia que la audiencia no se querrá perder.
La cinta sigue a tres personas en el año 1901 a través de Tierra del Fuego: Alexander Mc Lennan (apodado "El Chancho Colorado") un soldado británico; Bill, un mercenario americano; y Segundo, un chico mestizo chileno. Estos se embarcan en un viaje a caballo para continuar la delimitación de las tierras que el estado le concedió a José Menéndez (interpretado por Alfredo Castro). En su expedición hasta el Océano Atlántico, lentamente vemos cómo este viaje pasa de una tarea simple a una violenta cacería de los Selk’nam que habitan esas tierras.
En un western más complejo de lo que parece, Gálvez y su equipo dan con una obra visualmente asombrosa que tiene fuertes puntos en lo que dice, pero unos aún más latentes en lo que muestra. Aquí revisaré algunos de estos puntos (sin spoilers):
Lo que comunica la Patagonia
Vamos de lo general a lo particular. En el cine muchas veces se dice que el contexto/lugar es un personaje adicional para la trama. Eso podría ser cierto en el caso de "Los Colonos", pero creo que para esta película el concepto va más allá. El contexto es la trama y de alguna forma Tierra del Fuego se vuelve la protagonista indirecta de la cinta, transmitiendo mensajes con su paisaje, su fauna y sus habitantes: Los Selk’nam.
Para emular esto era sumamente importante que la cinematografía pudiese capturar esa mística conocida de estos lugares y Simone D’Arcangelo (Director de Fotografía) lo logra de manera extraordinaria. Éste aprovecha de enriquecer sus cuadros con los paisajes del extremo sur de Chile y a pesar de que la película no innova en su técnica, si captura en varias ocasiones increíbles tomas que dejarán boquiabiertos a muchos.
Independiente de que puedas o no leer el mensaje subyacente que trae la película, si podrás tener un festín visual, que por sí solo vale la pena.
Un Western diferente
Después del contexto que envuelve a "Los Colonos" vemos los acontecimientos que arman la historia. Esta es una cinta que avanza lentamente, pero de forma segura. Los roces entre McLennan, Bill y Segundo van creciendo a medida que el viaje se vuelve más cruel y su dinámica se va tornando más interesante con el paso del tiempo, especialmente porque van revelando sus verdaderos colores.
Eso es lo que hace especial este Western. No separa las aguas entre "los buenos" y "los malos", si no que los mezcla para que la tensión venga de su dinámica y no (solo) desde el conflicto armado.
Eso no quiere decir que la película no tenga sus momentos de violencia y combate. De hecho,
el segundo acto es la mejor parte de la obra porque logra combinar estos de forma perfecta, con brutales cacerías y tensos momentos que repercuten en la pantalla.
Si hay que decir que la obra después decae bastante porque deja esto que estuvo armando para saltar hacia las conclusiones de la historia, dejando algunos cabos sueltos en el camino que luego son solo relatados. Uno igual puede llegar al mensaje de la película, pero no quita esa sensación de que al relato le faltaron uno o dos capítulos más.
El Núcleo de "Los Colonos"
El mismo director del filme ha mencionado que la experiencia de ésta es una que otorga preguntas en sus conceptos crudos. La violencia que se muestra, las acciones de sus personajes y el ecosistema en el que se encuentran abren muchos puntos de discusión. La decisión de dejar que lo visual lleve la narración permite que haya matices y que el mensaje, por más interpretativo, sea efectivo hasta el día de hoy.
Tal vez los mejores mensajes son los subyacentes, los que su director decide esconder. Aunque puede ser que no los veamos de inmediato, esto nos incentiva a ver más de una vez.
Incluso, en el caso de que el mensaje no llegue, uno puede disfrutar del trabajo de su elenco. Mark Stanley, Benjamin Westfall y Camilo Arancibia (McLennan, Bill y Segundo, respectivamente), logran un potente trio con personalidades muy distintivas en sus acciones. Estos tres son el corazón de la entrega y llevan mucho mérito en la ejecución de ésta.
Dicho esto, es bueno repetir que "Los Colonos" puede no ser perfecta. Hay pedazos de relato que pueden faltar y el apuro que muestra en su final no cierra a sus personajes del todo. No obstante, es una obra que vibra con sus tomas, tiene buenas actuaciones y que probablemente se mantendrá en tu memoria durante un buen rato, dada la oportunidad de ver en la pantalla grande.
Una recomendación para la cartelera de este verano.