"
Back to Black", la nueva película biográfica sobre la carrera y vida de la cantante británica Amy Winehouse, llegó a los cines aunque acompañada de
cierta controversia y algunas críticas.
Ed Potton, del periódico The Times, encontró la película
"un poco ligera", y
aunque elogió los esfuerzos de Marisa Abela, la actriz que interpreta a la estrella, por cantar como Amy Winehouse,
dijo que no está a la altura de su inimitable voz.
Para Peter Hoskin del Daily Mail,
la película no logra ilustrar el "genio rebelde" de la cantante. "Es mejor escuchar 'Back to Black', el álbum o la canción, y recordar qué convirtió a Amy en una estrella", afirmó.
En tanto, Zach Schonfeld señaló en The Guardian que este tipo de películas biográficas "
siguen siendo rentables".
"
Es casi imposible pensar en una razón sincera para hacer una película sobre Winehouse, a menos que esté motivada por la codicia", escribió la periodista especializada en música Roisin O'Connor, hija de la cantante Sinead O'Connor, en el diario The Independent.
El filme biográfico de la directora británica Sam Taylor-Johnson, conocida por "Cincuenta sombras de Grey", es la segunda película dedicada a la cantante tras el documental ganador del Oscar de Asif Kapadia, "Amy", en 2015, que fue criticado por la familia Winehouse.
Ese filme, el segundo documental más taquillero de la historia en Reino Unido, se
centraba demasiado en los aspectos negativos de la vida de la estrella, según el padre de la cantante.
La película de Sam Taylor-Johnson sigue la vida de la cantante británica desde su adolescencia -donde contaba con una gran confianza en sí misma-, hasta su transformación en una megaestrella internacional y también, describe la tormentosa relación romántica de la cantante, ya que
su exmarido, Blake Fielder-Civil, fue
acusado de introducirla en el consumo de heroína.
Este romance estuvo marcado por la
persecución de los medios de comunicación y las adicciones de ambos. Sin embargo en 2009 se divorciaron y el también actor argumentó que una de las causas de la ruptura fue la infidelidad.
En ese sentido, la directora de "Back to Black" sostuvo que
"los paparazzi y la adicción" son los villanos del filme y no su exmarido.
El padre de Amy Winehouse asistió el lunes al estreno de la película en Londres junto a su exmujer, Janis, aunque la directora Sam Taylor-Johnson
afirmó que la familia de la cantante no había contribuido. "Era importante reunirme con ellos por respeto", explicó al sitio especializado en cine Empire,
"pero no podían cambiar las cosas ni dictarme lo que debía rodar".
El objetivo de la película
Cabe mencionar que muchos no estuvieron de acuerdo con la idea de una película biográfica sobre Winehouse y algunos dicen que es demasiado pronto después de la muerte de la cantante, quien falleció por
intoxicación por alcohol en 2011, cuando solo tenía 27 años.
En 2006, su segundo álbum
Back to Black, premiado con un Grammy en Estados Unidos, la dio a conocer en todo el mundo, impulsada por su éxito "Rehab", en el que la londinense relataba su lucha contra las adicciones.
Sin embargo, el propósito de la cinta es mostrar la
huella de la intérprete en el mundo de la música, con su voz ronca y conmovedora, sus letras íntimas y poderosas, y un estilo único, inspirado en los años 50, con su moño y sus múltiples tatuajes.
Asimismo,
la cineasta señaló que buscó "la verdad" sobre la vida de Amy Winehouse. "Amy amaba a su padre, hiciera lo que hiciera, bueno o malo", explicó la directora del filme.
El actor
Eddie Marsan, que interpreta a Mitch Winehouse, padre de la cantante, dijo que intentó evitar caer en la "cómoda" posición de "culpar a alguien" por la muerte de la artista, ya fuera su progenitor o su exmarido
Blake Fielder-Civil dijo en 2018 que siempre cargaría con "la culpa" de desempeñar un papel importante en las adicciones de Amy Winehouse.
Marisa Abela, que interpreta a la cantante, destacó que el objetivo de la película
no era "juzgar" a los personajes de la historia y sus decisiones.
"Si los espectadores sienten que Amy no debería haber confiado en tal o cual persona, están en su derecho (...)
pero los únicos malos en nuestra historia son las adicciones y los paparazzi. No le decimos a la gente lo que tiene que pensar", afirmó.
Tanto Abela como Taylor-Johnson quieren que su película muestre lo increíble
que fue Winehouse en la música y que la gente salga de los cines y escuche sus canciones. "Creo que ella sentiría que le devolvimos su música bajo una luz diferente", manifestó la directora. "Ojalá se sintiese orgullosa de ello y de nosotras", agregó.
Y Abela añadió: "Y de ella misma también, como catálogo de sus logros y de lo que supo crear siendo una mujer muy joven. Espero que ella la hubiese visto y se hubiese sentido orgullosa de todo lo que creó".
Pese a algunas críticas,
la película promete ser un éxito debido al aura que rodea a la cantante, aunque hayan pasado ya casi 15 años desde su muerte, y también debido a atracción que despiertan los filmes biográficos musicales, casi siempre rentables, independientemente de su calidad.
