Lily Allen y David Harbour estuvieron cuatro años casados.
La Nación/GDA
La cantante británica
Lily Allen confirmó su
separación de su esposo, el actor
David Harbour,
tras cuatro años de matrimonio luego de descubrirlo en una
aplicación de citas de celebridades, y anunció que se tomará un
descanso del mundo del espectáculo debido a la ruptura.
En el podcast "Miss Me?", programa que la intérprete de 39 años presenta junto Miquita Oliver, la artista recordó una historia que incluía a Harbour durante sus vacaciones en Kenia el año pasado y
al tropezar con la palabra "marido", admitió que
"no estaba en un buen lugar".
Luego de esto, y según recogió el Daily Mail, la voz de "Smile" se refirió a su estado de salud y detalló que sufre
ataques de pánico y que es incapaz de concentrarse en nada más que en su dolor.
"Me resulta difícil interesarme en algo, realmente no estoy en un buen lugar", señaló.
"No puedo concentrarme en nada más que en el dolor que estoy sintiendo. Es muy duro", agregó.
Cabe mencionar que la confirmación de la ruptura llega después de que circularan rumores durante semanas que apuntaban a la separación de la pareja.
La intérprete comenzó a
sospechar que
Harbour, conocido por interpretar a Jim Hopper en la serie "Stranger Things",
la engañaba y para averiguarlo, Allen se creó un perfil en la aplicación de citas para celebridades llamada
Raya, donde ambos se conocieron.
En esta
fingió estar "buscando mujeres", y descubrió que el actor tenía un perfil secreto en la plataforma y que
figuraba como activo desde hace al menos un mes, según reveló el mismo medio británico. Cuando vio esto, la cantante quedó en "agonía" y una fuente reveló que quedó "destrozada".
Asimismo, una amiga de Lily confirmó que la pareja se separó oficialmente en diciembre y cuando esto sucedió, la artista estaba convencida de que él tenía una novia secreta.
"No he recaído"
La cantante de "Fuck you" también anunció que como consecuencia de su separación y de sus ataques de pánico,
se va a tomar un descanso del mundo del espectáculo. "Me voy la semana que viene por unas semanas, oyentes", indicó en su podcast.
Además, en la instancia Lily aseguró
que va a ignorar cualquier especulación que apunte a que podría haber regresado a rehabilitación después de una adicción a las drogas en el pasado. "Pero quiero tranquilizar a la gente porque habrá especulaciones debido a la cantidad de tiempo que estaré fuera de que voy a ir a rehabilitación de drogas", manifestó.
"No he recaído", sentenció.
Y agregó: "He visto algunos rumores horribles en internet que dicen que mi marido me encontró en un fumadero de crack rodeada de hombres. No sé quién está difundiendo estos rumores perversos, pero no son ciertos".
La intérprete también habló de cómo sus
dos hijas, Ethel, de 13 años, y Marnie, de 11, que comparte con su ex Sam Cooper,
han sido un pilar de apoyo durante estos momentos.
"Es realmente difícil, pero
ellas siempre están ahí y uno tiene que estar presente y ahí para ellas. (...) Es realmente agradable tener a las niñas cerca, son una alegría", afirmó.
Sin embargo, aseguró que "cuando las cosas no van tan bien y la vida se pone difícil, como le sucede a mucha gente por diversos motivos, es muy difícil mantener la calma".
Pese a ello, estableció que son "una red de apoyo mutua y nos alentamos mutuamente a hablar sobre nuestros sentimientos, pero creo que lo principal es decirles que vamos a superarlo y estaremos bien".
