SANÁ.- El subjefe del Estado Mayor de la Defensa yemení, general Ahmed Seif al Yafai, murió hoy en un ataque con un misil lanzado por el grupo rebelde de los hutíes contra su vehículo en las afueras de la ciudad de Al Moja, en la costa del mar Rojo, informó a Efe una fuente militar.
Asimismo, otros siete oficiales del Ejército que viajaban con él fallecieron en el ataque, añadió la fuente sin desvelar la identidad de las víctimas.
El Primer Ministro yemení, Ahmed Obeid bin Daghr, expresó su tristeza y su pesar por la muerte de este "dirigente valiente", en un mensaje difundido a través de la red social Twitter.
Al Yafai es el primer dirigente militar de alto rango que muere en el Yemen, escenario de un conflicto armado desde hace más de dos años y en el que interviene una coalición de países suníes liderados por Arabia Saudí en contra de los rebeldes chiíes.
Los cuerpos de Al Yafai y de los otros fallecidos fueron trasladados a la ciudad cercana de Aden, sede temporal del Gobierno yemení, en un helicóptero de la coalición árabe, informó la televisión estatal.
Al Yafai era el responsable de las fuerzas gubernamentales encargadas de arrebatar a los hutíes el control de los territorios occidentales del país, donde estos dominan amplias áreas, incluida la capital, Saná.
El general anunció a finales del pasado mes de enero la liberación de Al Moja, situada en la provincia de Taez (suroeste), que estaba controlada por los hutíes desde finales de 2014.
Hoy se registran combates entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes en el este de Al Moja y los rebeldes tratan de frenar el avance de las tropas hacia el puerto de Al Hodeida, ubicado en la costa del mar Rojo al norte de Al Moja, y hacia Taez, al oeste.
Las fuerzas leales al presidente Abdo Rabu Mansur Hadi se enfrentan a los rebeldes en muchas regiones del Yemen, desde que estos expulsaron al Gobierno de Saná en septiembre de 2014.
La intervención de la alianza árabe desde marzo de 2015 ha exacerbado el conflicto y el sufrimiento de los civiles, con 3,3 millones de yemeníes -incluyendo 2,1 millones de niños- que sufren malnutrición aguda, según la ONU.