MOSCÚ.- Rusia no ve posible que la comunidad internacional consensúe un proyecto de resolución de la ONU sobre el uso de armas químicas en Siria después del ataque a una base aérea siria por parte de Estados Unidos.
"Diría que el futuro del proyecto de resolución ha sido obstruido por los acontecimientos. Es difícil creer que seremos capaces de consensuar el texto", dijo este sábado a Interfax el viceministro ruso de Asuntos Exteriores, Guennadi Gatílov.
Recordó que la propuesta rusa pedía una investigación en profundidad del ataque que costó la vida a más de 80 civiles sirios y descartaba echar la culpa automáticamente al régimen de Bachar al Asad, como se apresuraron en hacer EE.UU., Reino Unido y Francia.
"Hicimos propuestas concretas sobre el envío de una misión para investigar el incidente sobre el terreno, sobre la creación de un equipo internacional equilibrado, capaz de hacer una valoración objetivo de lo sucedido. Pero tras el ataque estadounidense, ya no tiene sentido", apuntó Gatílov.
A pocos días de la visita a Moscú del secretario de Estado de EEUU, Rex Tillerson, el viceministro lamentó que la acción militar de Washington haya hecho retroceder la perspectiva de cooperar en la lucha contra los terroristas en Siria.
"Después de la acción militar injustificada contra Siria, que es de hecho según el derecho internacional una agresión contra un Estado soberano sin base alguna, será difícil buscar nexos" entre los dos países en el ámbito antiterrorista.
Moscú suspendió el acuerdo de coordinación militar con EEUU para evitar incidentes aéreos en Siria, en vigor desde el pasado año, en respuesta al lanzamiento de 59 misiles estadounidenses contra una base aérea siria.
También adelantó sus planes de reforzar la defensa antiaérea siria ante futuros ataques y advirtió de que las baterías antimisiles rusas que garantizan la defensa de las dos bases aéreas funcionan las 24 horas.